La Archidiócesis de Sevilla (España) ha condenado enérgicamente el «vil» incendio provocado este domingo en la iglesia de Santa Marina y ha informado de que no ha causado daños personales ni graves secuelas en el patrimonio del templo.
El suceso se produjo en la madrugada del día 5 de enero cuando, según las primeras pesquisas, se «lanzaron dos recipientes con un líquido inflamable en las puertas del templo, de manera que el líquido se coló por la rendija de la puerta provocando que prendiesen las cortinas que había en el interior», según fuentes policiales.
La rápida llamada de los vecinos al número de emergencias y la pronta actuación de los bomberos hizo que el suceso se quedara sólo en un susto y que sólo haya que lamentar algunos daños materiales.
En un comunicado, la archidiócesis censura a los que «se atreven a cometer estas vilezas, que ofenden a Dios, a los fieles católicos y a muchas personas de buena voluntad, y son expresión de un odio estéril que sólo genera crispación y temor y que no contribuye a la pacífica y justa convivencia».
Por su parte, la Junta Superior del Consejo General de Hermandades y Cofradías de Sevilla ha manifestado su «consternación» ante el «atentado sufrido» por este emblemático templo, sede de la Hermandad de la Sagrada Resurrección, así como su «más enérgica condena» al incendio provocado.
En un comunicado, el Consejo afirma que se trata de un «atentado contra los sentimientos religiosos y contra los bienes patrimoniales religiosos que custodian los templos y hermandades», lo que a su entender supone el «desprecio más absoluto por la libertad humana y los valores de convivencia cívica».
Así, asegura que las Hermandades y Cofradías de Sevilla representan un «valioso cauce de expresión» de la fe católica y de los sentimientos religiosos de «miles de sevillanos»; mientras que exigen de todos los ciudadanos y poderes públicos el «respeto escrupuloso de la libertad religiosa y de culto público, elementos esenciales para la convivencia ciudadana».
«Desde el primer momento de tener conocimiento de este lamentable atentado el Consejo de Cofradías ha mostrado su disponibilidad total con la citada hermandad para cualquier cosa que pueda necesitar», añade, tras poner en valor que no se hayan producido daños personales.
Esta iglesia de arquitectura gótico mudéjar, sede canónica de la hermandad que cierra la Semana Santa de Sevilla, es uno de los templos más antiguos de la ciudad, pudiendo estar datada su construcción sobre el año 1265.
Pero el intento de incendio de Santa Marina no ha llegado sólo. Ha sido precedido en noches anteriores con pintadas a favor del aborto y amenazas de recurrir al fuego contra la Iglesia.
Precisamente, en pleno domingo las autoridades municipales limpiaron estas pintadas amenazadoras que llevaban varios días en las iglesias de Los Servitas, San Marcos y Santa Paula de Sevilla.
En una de las fachadas de la capilla de los Dolores, de la Hermandad de Los Servitas, la pintada llevaba varios días amenazando con estas palabras: «Por nuestros muertos. Fuego!!».
También al comienzo de la Navidad se leía en el cercano convento de Santa Paula: «Mi cuerpo, mi desición. Aborto libre». Además había pintadas con el texto: «Solidaridad anarquistas presos».
El domingo por la mañana se limpiaron otras pintadas más recientes, al parecer escritas en la misma noche del incendio provocado, en la iglesia de San Marcos, muy cercana a los anteriores edificios. En estas se podía leer: «Aborto libre».
Hace unos días también aparecieron pintadas en defensa del aborto en la localidad sevillana de Dos Hermanas, sobre las paredes de un colegio religioso y en una casa hermandad.
(RED/IV)
