A lo largo del año 2013, aumentó la violencia contra los cristianos. El dato fue confirmado hace unos días por el índice mundial sobre persecuciones, la clasificación anual de los cincuenta países más afectados, realizado por la asociación Portes Ouvertes France.
Durante la rueda de prensa de presentación del informe, el director Michel Varton afirmó que «en el ámbito de las persecuciones la asociación no considera solamente los actos de violencia, sino también las presiones, las prohibiciones o las discriminaciones por razón religiosa. La noticia retomada también en el Osservatore Romano el pasado día 9 de enero indica que además, «el análisis considera cinco parámetros de la libertad, desde un punto de vista de las poblaciones cristianas, de vivir libremente la propia fe: en lo privado, en familia, en las comunidades, en la Iglesia y en la vida pública».
Corea del Norte permanece el país donde las condiciones de vida de los cristianos son cada vez más peligrosas y precarias, por doceavo año consecutivo. Allí basta tener en casa un libro o una imagen sagrada para ser acusado por traición al Estado. el segundo puesto lo ocupa Somalia «ya que las tribus y clanes musulmanes condenan a muerte a todos los cristianos que encuentran». Sin embargo, en otras naciones los cristianos son sometidos a fuertes presiones, como sucede en Afganistán, las Maldivas, Mali, Arabia Saudí, Yemen, Irán, Libia, Uzbekistán y Qatar; mientras que Tanzania y Nigeria se encuentran en rápido ‘ascenso’. Además, Varton observó que «en treinta y seis de los cincuenta países tomados en consideración por la asociación, el islamismo es en gran parte responsable de las persecuciones de los cristianos».
En la rueda de prensa participó Joseph Fadelle, musulmán iraquí convertido del islam al cristianismo y declaró «soy un muerto viviente». Ya que está condenado a muerte por su familia por esta traición y por lo que tuvo que huir a Francia y vive bajo protección. (Leer la entrevista que hizo para ZENIT).
Otro tema afrontado en el estudio es el relacionado con los homicidios. El director de Portes Ouvertes afirmó que «es Siria, en medio a una guerra civil, la que ostenta el triste record del número de cristianos asesinados, llegando hoy al mil doscientos trece», pasando del onceavo al tercer puesto en esta clasificación. Según el informe, Pakistán ha visto «el peor ataque contra los cristianos desde el inicio de su creación (1947), con un doble atentando suicida a la salida de la iglesia católica de Todos los Santos, en Peshawar, donde 89 fieles fueron asesinados y 140 quedaron heridos, el 22 de septiembre de 2013. Otro ejemplo: Egipto. Fueron 167 los episodios violentos de persecuciones y 492 los intentos de clausura de iglesias según revela Portes Ouvertes.
De otro lado el Instituto Pew Research Center, ha hecho público un estudio en el que confirma que «aumenta la persecución de cristianos y de creyentes, en el mundo.
Según este instituto, el número de países con un nivel alto o muy alto de restricciones a la religión alcanzó en 2012 su pico más elevado de los últimos seis años, y afecta al 43 por ciento de los países.
En términos de población mundial afectada, afirma que 5.300 millones de personas -el 76 por ciento de la población mundial- vive en países donde se ejerce algún tipo de restricción o persecución de los creyentes.
Un tercio (33 por ciento) de los 198 países y territorios incluidos en el estudio tenían niveles altos de hostilidad religiosa en 2012, frente al 29 por ciento en 2011 y el 20 por ciento a mediados de 2007. La hostilidades religiosas aumentaron en todas las principales regiones del mundo, excepto en América. El mayor aumento ha sido registrado en el Oriente Medio y África del Norte, que todavía está viviendo los efectos de los levantamientos políticos 2010/11 conocidos como la Primavera Árabe. Del mismo modo se produjo un aumento significativo en las hostilidades religiosas en la región de Asia-Pacífico, donde China alcanzó la categoría «alta» por primera vez.