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Jan 22, 2014 00:00
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El 14 de enero, un grupo de católicos franceses ha puesto on-line una petición dirigida al papa Francisco con motivo de la visita que realizará el presidente François Hollande al Vaticano el próximo 24 de enero. Esta carta abierta, que refleja el malestar de los fieles galos y denuncia los proyectos sociales del gobierno socialista, ya ha superado las 100.000 firmas.
En la misiva titulada "Visita de F. Hollande al Vaticano: carta abierta al Papa”, los firmantes manifiestan la preocupación creciente de muchos católicos en Francia frente a los abusos del Ejecutivo de Hollande contra los principales derechos fundamentales de la persona humana (Ley Taubira sobre las uniones homosexuales y la adopción, Procreación Médicamente Asistida – Maternidad Subrogada, investigación con embriones humanos, eutanasia, políticas de género, etc.) y denuncian los ataques a los que son sometidos a diario (campaña de desprestigio en los medios de comunicación, profanación de iglesias, etc.).
Los promotores de la petición al Santo Padre presentarán el día 23 de enero, víspera del encuentro entre ambos dignatarios, el conjunto de firmas recogidas, mediante una copia impresa y otra en soporte digital.
Una de las claves del éxito de esta iniciativa, que no deja de sumar adhesiones, ha sido utilizar la plataforma internacional CitizenGO en Francia. Se trata de una comunidad de ciudadanos que se reúne con la finalidad de impulsar su participación en la vida pública de sus países y en el ámbito internacional.
CitizenGO defienden de una forma efectiva la vida, la familia y la libertad a través de acciones on-line. Gracias a su plataforma digital dirigen sus peticiones a las autoridades locales, nacionales o mundiales, políticas o económicas.
El equipo internacional de CitizenGO lanza sus campañas en 7 idiomas – inglés, español, francés, portugués, italiano, alemán y polaco – e influye en instituciones, organismos y organizaciones de 50 países diferentes. Pero su trabajo sólo es posible gracias al apoyo de una extensa red internacional de miles de voluntarios en todo el mundo.
La plataforma prevé alcanzar en tres años la vertebración de 3 millones de usuarios activos a nivel global, con un alcance potencial de más de 2.700 millones de personas que influirán en organismos de más de 50 países.
Desde su elección en 2012, esta será la primera visita al Vaticano por parte del jefe del Estado francés. François Hollande, que ya ha viajado a Roma para mantener conversaciones con las autoridades italianas cuatro veces desde su llegada al poder, no se ha encontrado nunca con Benedicto XVI o con el Pontífice argentino.
Hasta el momento, sólo el primer ministro de Francia, Jean-Marc Ayrault, había asistido a la misa inaugural del pontificado del papa Francisco el pasado 19 de marzo.
Los puntos en común entre París y la Santa Sede son varios - la justicia social y la paz en África, la situación de los cristianos de Oriente, la defensa del medio ambiente -, pero hay algunos temas más delicados que les separan radicalmente, como la reciente legalización en Francia de las uniones entre personas del mismo sexo o el proyecto para legalizar la eutanasia.