(ZENIT – 8, dic. 2017).- “Jerusalén tiene una vocación especial para la paz”. Es la declaración del obispo Georges Pontier, arzobispo de Marsella y Presidente de la Conferencia Episcopal de Francia, que retoma las palabras del Papa e invita a orar en comunión con las comunidades cristianas de Tierra Santa.
Declaración del Obispo Georges Pontier
Después de la decisión estadounidense de reconocer a Jerusalén como la capital del Estado de Israel, quiero hacerme eco de las palabras del Papa Francisco en la audiencia general de este miércoles 6 de diciembre: “No puedo ocultar mi profunda preocupación por la situación que se ha desarrollado en los últimos días, y al mismo tiempo hago una fuerte llamada para asegurar que el compromiso de todos sea respetar el status quo de la ciudad, de conformidad con las resoluciones pertinentes de las Naciones Unidas. Jerusalén es una ciudad única, sagrada para judíos, cristianos y musulmanes, que adoran en ella los Santos Lugares de sus respectivas religiones, y tiene una vocación especial en la paz”.
Mientras esperamos que el Príncipe de Paz venga a nuestro mundo, invito a los católicos a intensificar su oración por esta intención en comunión con las comunidades cristianas presentes en Tierra Santa.
© Traducción ZENIT, Raquel Anillo
