(ZENIT Noticias / Nueva York, 18.01.2022).- 67 hospitales, orfanatos y escuelas es una pequeña muestra del legado de una mujer italo-americana que no sólo luchó por los derechos de los inmigrantes sino que también le llevó a un combate por la santidad de vida que tras su muerte le fue reconocido y le condujo también a los altares.
Se trata de la Madre Francesca Cabrini (la primera ciudadana estadounidense canonizada por la Iglesia católica: 7 de julio de 1946), una mujer cuyo testimonio de vida, cuya causa y cuyo liderazgo femenino, ha movido al director de cine Alejandro Monteverde y al productor Eustace Wolfington para llevar esa vida a la pantalla grande. El estreno de esta cinta está previsto para finales de 2022.
Monteverde no es cualquier director: en 2006 ganó en el Festival de Cine de Toronto con la cinta “Bella” y en 2015 logró no poco éxito en taquilla con Little Boy, al lado de Eduardo Verástegui. “Cabrini”, la nueva cinta, viene de la mano de actores del mundo del cine como Cristiana dell´Anna (serie Gomorra), Virginia Bocelli (hija del cantante del mismo apellido) o John Lithgow (de la serie The Crown). “Decidimos escribir una película sobre una mujer que resulta ser monja”, dice Wolfington. Esta declaración puntualiza un hecho: no se trata de una “película cristiana más” o un simple y edificante film sobre una vida de santos. Es, a todos los efectos, una gran producción cinematográfica.
Pero sí hay una novedad: la distribución está pensada para realizarse mediante streaming. Todos los beneficios que lograse obtener la cinta serán destinados a obras benéficas para así lograr una continuidad entre la obra de la Madre Cabrini y esta iniciativa “hollywodesca”.
Aunque la cinta ya está avanzada (las grabaciones iniciaron en junio de 2021), la recaudación comenzó en el segundo semestre de 2021 en Nueva York. El objetivo es conseguir los 40 millones de dólares que implica la realización completa de la película.
Madre Caribini fue la menor de 13 hermanos. Nació en Italia. En 1880 funda el Instituto de las Misioneras del Sagrado Corazón de Jesús y emigra a Estados Unidos, concretamente a la ciudad de Nueva York. Ahí trabajó entre los inmigrantes, por cuyos derechos luchó. Murió en 1917 y tras su canonización, por parte del Papa Pío XII, es declarada patrona de los inmigrantes. La American Committee on Italian Migration de Nueva York la calificó como la “inmigrante italiana del siglo XX”.
«Soy una mujer, soy italiana, y estoy cansada de los hombres pequeños como tú, que son incapaces de ver que todos somos seres humanos», dice la actriz Dell’Anna, interpretando a la Madre Cabrini. «El mundo es demasiado pequeño para lo que pretendo hacer». Lo que hizo es lo que contará esa cinta.