(ZENIT – Lima, 26 nov. 2018).- «¿Qué está pasando en nuestro país?» se preguntan los Obispos del Perú, ante la grave crisis que agobia a todos los peruanos como consecuencia del deterioro de los valores éticos, sustentaron los miembros del episcopado peruano durante una conferencia de prensa ofrecida en la sede de la Conferencia Episcopal Peruana (CEP).
Y es que la corrupción está enraizada en las instituciones con la implicación de políticos y grupos de poder a nivel local, regional y nacional. Esta situación desprestigia la institucionalidad del Estado, afirman los obispos en el extenso comunicado presentado en conferencia de prensa el 22 de noviembre.
El silencio se ha convertido en cómplice del blindaje político de aquella inaceptable primacía de los intereses personales y grupales en desmedro del bien común reflexionan en el comunicado. Esta situación genera en la población indignación, creciente rechazo y una profunda desconfianza además del clamor de una auténtica justicia, puntualiza el mensaje.
Construir esperanza
Los obispos en conjunto exhortaron a los peruanos a construir esperanza. “Es indispensable consolidar una sociedad que se sustente en el respeto irrestricto de los principios democráticos” subrayaron en su reflexión.
A su turno, el cardenal Pedro Barreto Jimeno sostuvo que “le toca a todas las autoridades peruanas promover una cultura de la honestidad. La honestidad crea no solo una riqueza moral, sino también económica”, puntualizó el también primer vicepresidente de la CEP.
«¿Qué Perú queremos heredar a las próximas rgeneraciones?», se interpelan los prelados. No se puede tolerar más convivir con la corrupción. Urge eliminar este flagelo de forma inmediata. Es preciso garantizar un estado de derecho íntegro, honesto e independiente, que imponga sanciones efectivas a quienes sean penalmente responsables sostuvieron enérgicamente en el pronunciamiento que lleva la firma de los obispos integrantes de la presidencia del episcopado peruano.
Es de imperiosa necesidad sentar las bases de nuestro país a partir de la reserva y conciencia moral de la población. En consecuencia, urge la tarea de recomponer la clase política, y consolidar los poderes del Estado en su independencia y autonomía.
Elegir con responsabilidad
La ciudadanía tiene derecho a ser informada, así como la obligación de informarse a fin de emitir un voto cívico, consciente y responsable, han propuesto los obispos. Este instrumento de participación ciudadana ofrece a todos los peruanos la oportunidad de encausar la fuerza de un pueblo que hoy clama por un cambio radical.
Más aún ante la cercanía de la celebración del bicentenario de la independencia del Perú los peruanos debemos buscar la construcción de un país cada vez más justo, y así fortalecer el compromiso de promover la institucionalidad democrática y elegir autoridades con verdadera vocación de servicio que logren acompañar el ansiado desarrollo integral de nuestro querido pueblo, finalizan los obispos.
Acompañaron en esta declaración al Presidente de la Conferencia Episcopal Peruana monseñor Miguel Cabrejos Vidarte, el secretario general de la CEP monseñor Norberto Strotmann, el primer y segundo vicepresidente de la CEP respectivamente monseñor Pedro Barreto Jimeno y monseñor Robert Francis Presvot obispo de Chiclayo, entre otras autoridades eclesiales.
Obispos del Perú © Conferencia Episcopal Peruana
Obispos del Perú: "No podemos tolerar más convivir con la corrupción"
Los prelados piden construir esperanza ante crisis moral