LIMA, lunes, 20 diciembre 2004 (ZENIT.org).- El presidente de la Conferencia Episcopal Peruana (CEP), Monseñor Hugo Garaycoa Hawkins, y el secretario general, monseñor Juan José Larrañeta Olleta, OP., han hecho un llamamiento en vísperas de la Navidad a todos los peruanos a no perder la esperanza en el país a pesar de la difícil situación.
Su deseo para esta Navidad es que «Jesús ilumine a los gobernantes para mejorar el panorama social en el Perú».
En declaraciones a la Oficina de Prensa de la CEP, Monseñor Garaycoa constató que lamentablemente el 2004 ha sido un año de crisis de autoridad que generó cuestionamientos a los poderes del Estado, además de falta de seguridad y respeto a la vida humana.
Ante este panorama el obispo pidió a los peruanos fortalecer los canales de diálogo y «hacer un examen de conciencia sobre nuestras acciones, a fin de mejorar nuestra participación en la sociedad». Asimismo hizo votos para que todos los cristianos «vivamos la solidaridad en esta Navidad sembrando esperanza en nuestro país, con justicia y paz».
Por su parte, monseñor Larrañeta señaló que el presente año se ha caracterizado por la falta de credibilidad en las autoridades «lo cual es señal de que el sistema social no camina bien».
Por eso invocó a todos a reflexionar sobre la actual coyuntura social en la que vivimos los peruanos, para trabajar en base a la honestidad y coherencia, sin engaños y con veracidad.
«En esta Navidad recemos por el Perú, para que esa sencillez y transparencia del Niño Jesús llegue a nuestros gobernantes y autoridades», exhortó monseñor Juan José Larrañeta, y pidió que todos los peruanos unamos fuerzas para mejorar el panorama y sacar adelante a nuestro país.
