Para la mañana de hoy no se han preparado grandes discursos del papa Francisco ni eventos multitudinarios. Los encuentros de lo que va de jornada han sido de los más íntimos y personales del programa de esta JMJ.
A las 7.30 el papa ha celebrado misa en la Residencia de Sumaré en la que han concelebrado algunos padres jesuitas presentes en Río de Janeiro. Según reporta Radio Vaticana, durante la homilía el santo padre ha pedido «que el Señor bendiga a nuestros abuelos» y nos permita «envejecer con sabiduría». Tener la sabiduría de sentirse un «eslabón de la cadena» de la historia del mundo, ha añadido.»¡Que sea como el buen vino, que cuando envejece mejora! ¡Que Dios nos done la gracia de envejecer con sabiduría, de envejecer con dignidad», dijo Francisco.
A las 9.45 el santo padre Francisco se ha dirigido en coche al Parque «Quinta da Boa Vista», área que alberga el Bioparco de Río de Janeiro y el homónimo Museo Nacional, para las confesiones de algunos jóvenes de la JMJ. Del mismo modo que lo hizo Benedicto XVI en el Parque del Retiro, durante la JMJ de Madrid.
El coche del papa ha entrado por el ingreso principal del Parque donde hay preparados 50 confesionarios para dar a los jóvenes la posibilidad de acercarse al sacramento de la reconciliación. El santo padre irá a un confesionario elegido y previsto para que escuche la confesión de cinco jóvenes, tres chicas y dos chicos, de lengua española, italiana y portuguesa.
Después de las confesiones en el Parque «Quinta da Boa Vista», el santo padre ha ido con el coche hasta el palacio de São Joaquim, sede del arzobispado de Río de Janeiro, y ha sido acogido a su llegada por el arzobispo monseñor Orani João Tempesta. Aquí el papa ha tenido un breve encuentro reservado con cinco jóvenes presos, acompañados de algunos asistentes. Después, el santo padre y el arzobispo se dirigirán a la capilla donde se encuentran reunidas las hermanas de la Residencia.
A las 12 se ha asomado al balcón del Palacio para rezar el Ángelus, para introducir la oración ha hablado de la importancia y el papel de los abuelos en el día de san Joaquín y santa Ana. El papa ha señalado «¡qué precioso es el valor de la familia, como lugar privilegiado para transmitir la fe!». Sobre el papel de los abuelos ha afirmado: «qué importantes son en la vida de la familia para comunicar ese patrimonio de humanidad y de fe que es esencial para toda sociedad. Y qué importante es el encuentro y el diálogo intergeneracional, sobre todo dentro de la familia».
Después de la oración mariana el papa Francisco se ha encontrado con los 20 miembros del Comité Organizativo eclesiástico y los 10 grandes patrocinadores y benefactores de la JMJ. Y para finalizar la mañana el papa comerá con 12 jóvenes de varias nacionalidades: un joven y una joven por cada continente y un chico y una chica brasileños.
Esta noche, Francisco presidirá en la playa de Copacabana el tradicional Vía Crucis de la Jornada Mundial de la Juventud, uno de los momentos más significativos de esta gran celebración de la juventud.