CIUDAD DEL VATICANO, domingo, 16 noviembre 2008 (ZENIT.org).- Benedicto XVI exigió atención en la carretera para evitar accidentes en los que pierden la vida demasiadas personas, al concluir la oración mariana del Ángelus.
Con su admonición el Papa se unió a la jornada convocada en ese día por asociaciones de víctimas de accidentes de tráfico, apoyada por una resolución de las Naciones Unidas (http://www.worlddayofremembrance.org)
La iniciativa, como dijo el Papa, busca recordar «de manera especial a aquellos que han fallecido como resultado de accidentes de tráfico».
«Rezamos por su descanso eterno y por el consuelo de sus familias en luto por su pérdida», exhortó.
Asimismo, pidió «que cada quien –conductores, pasajeros y peatones– presten atención a las palabras de san Pablo en la liturgia de la Palabra de hoy: ‘permanezcamos atentos y seamos sobrios».
«Nuestro comportamiento en la carretera debería caracterizarse por la responsabilidad, la consideración y el respeto de los demás. Que la Virgen María nos conduzca con seguridad por las calles y autopistas del mundo», deseó.