(ZENIT – Roma, 6 Sept. 2017).- Con el horario del programa un poco atrasado debido a la gran cantidad de gente que le esperaba en las inmediaciones de la Nunciatura en Bogotá, el papa Francisco llegó en papamóvil procedente desde el aeropuerto de El Dorado, donde las autoridades del país le dieron la bienvenida.
En el exterior de la nunciatura apostólica en Bogotá, delante del portón, un grupo de niños con trajes folklóricos hizo una coreografía, otro grupo de jóvenes cantó al son de música y una banda de música centroamericana tocó en su honor.
El Pontífice recibió a dos instituciones: El IDIPRON es una entidad pública de la ciudad de Bogotá que atiende a niños, niñas, adolescentes y jóvenes en situación de vulnerabilidad social, habitantes de la calle o en riesgo de estarlo. También recibió a las Familias de la Misericordia (Famis) FAMIS de laicos y sacerdotes, que desean vivir la Misericordia, quienes trabajan en las periferias.
En medio de todo esto el Papa fue a rezar en la capilla de sede diplomática del Vaticano. Allí cenó y la comida fue preparada por la cocinera habitual de la institución. El Pontífice pernoctará en este edificio las cuatro noches que pasará en Colombia.
Hasta el domingo el papa visitará cuatro ciudades: Bogotá, Villavicencio, Medellín y Cartagena. En total celebrará tres misas y pronunciará 12 discursos.
Francisco llega a la Nunciatura, donde le reciben con cantos y bailes
En las cuatro noches del viaje pernoctará en la sede diplomática de la Santa Sede