Setecientas ciudades se unen a la Jornada mundial contra la pena de muerte

Organizada por la Comunidad de San Egidio

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CIUDAD DEL VATICANO, viernes, 30 noviembre 2007 (ZENIT.org).- Unidas virtualmente desde Roma, 700 ciudades del mundo se han conectado para conmemorar el aniversario de la primera abolición de la pena de muerte el 1786 por parte del Granducado de Toscana.

Las ciudades de más de 50 países han organizado manifestaciones, asambleas, conciertos y conferencias con testimonios de personas cercanas a víctimas de la pena de muerte. Entre otras acciones se han leído cartas de personas que están en el brazo de la muerte (la zona de la cárcel anterior a las cámaras donde se ejecuta la pena letal).

El centro mundial de esta Jornada por la vida contra la pena de muerte ha sido Roma, con el símbolo del Coliseo iluminado de manera particular con esta ocasión. La antigua condenada a muerte libanesa Antoinette Chahine ofreció su testimonio, así como Giovanni Bachelet, familiar de una víctima y Mario Marizziti, representante de la Comunidad de San Egidio.

En estos momentos se está ratificando la Resolución para una Moratoria Universal por parte de la Asamblea General de las Naciones Unidas.

La Comunidad de San Egidio se ha hecho portavoz de la causa contra la pena de muerte. El 2 de noviembre de este año entregó cinco millones de firmas para una moratoria universal de la pena de muerte.

Marazziti, junto a la religiosa Helen Prejan, participó en la entrega de las firmas al presidente de la Asamblea General de la ONU, Srgjan Kerim.

Desde el año 2002 la Comunidad ha instituido el 30 de noviembre como «Jornada Mundial de la Ciudad para la Vida-Ciudades contra la pena de muerte».

Bajo el lema «No hay justicia sin vida», algunas de las ciudades que han adherido a la iniciativa este año son Nueva York, Amsterdam, Kigali, Buenos Aires, Madrid, Cali, Guayaquil, Manila.

Por Miriam Diez i Bosch

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ZENIT Staff

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