MADRID, viernes 7 de mayo de 2010 (ZENIT.org).- Los gobiernos europeos han prometido a los países más vulnerables del mundo su voluntad de cumplir los Objetivos de Desarrollo del Milenio de Naciones Unidas (ODM) en 2015. “¿Podrá la UE cumplir sus compromisos?”, se preguntan los responsables de Caritas Europa en vísperas de la reunión del Consejo de Asuntos Exteriores de la UE prevista para los días 10 y 11 de mayo en Bruselas.

Cuando quedan cinco años para que expire el plazo marcado, el grado de éxitos alcanzados es muy desigual y todavía queda mucho por hacer. Caritas Europa cree, sin embargo, que aún es posible cumplir los compromisos adquiridos, informa la página web de Caritas Europa. 

En un nuevo documento de posición y en una reciente carta abierta a los Gobiernos de la UE, Caritas Europa esboza una serie de recomendaciones alcanzables por parte de esos mismos Gobiernos.

Aunque la organización humanitaria de la Iglesia saluda los importantes avances incluidos en la comunicación de la Comisión Europea sobre los ODM, de 21 de abril, espera en que ciertas cuestiones sean mejoradas cuando dicha comunicación se debata tanto en la reunión del Consejo de Asuntos Exteriores del 10 y 11 mayo, como en la prevista para los días 14 y 15 junio, que se celebran en un momento particularmente significativo, ya que servirán para perfilar el enfoque de la UE ante la crucial cumbre de la ONU sobre los ODM prevista para los días 22-24 septiembre.

La UE, como líder mundial en ayuda oficial al desarrollo, proporciona más de la mitad del presupuesto total de la ayuda global.

Por ello, para Caritas Europa es de vital importancia que la Unión Europea siga apostando por un decidido apoyo a la solidaridad con el mundo en desarrollo.

En lo que se refiere al Plan de Acción de la UE sobre los ODM, Caritas Europa entiende que la Unión debe, en primer lugar, “demostrar el respeto y la promoción de los derechos humanos, así como sensibilidad hacia las actuales necesidades de los más pobres y hacia los intereses de estas personas”.

A este respecto, “Caritas Europa invita al Consejo a asegurar que las medidas sobre los ODM relacionadas con los pueblos y las regiones respondan a criterios basados en sus auténticas necesidades, antes que a consideraciones de otro tipo (geopolítico o comercial)”.

En segundo lugar, pide “incluir acciones concretas dirigidas a mejorar la seguridad alimentaria, fortalecer el papel de la mujer, frenar la propagación del vih-sida y otras enfermedades, garantizar la sostenibilidad ambiental y poner en marcha una auténtica cooperación para el desarrollo”.

En este sentido, “Caritas Europa insta al Consejo a garantizar que la sostenibilidad medioambiental se integre en todas las políticas de la UE y a que se tenga en cuenta el impacto de la migración en el cumplimiento de los ODM”.

En tercer lugar, propone “acompañar el Plan de Acción de la UE sobre los ODM con una estrategia financiera, que incluya la AOD (Ayuda Oficial al Desarrollo) y otros instrumentos, dirigida a asegurar la financiación para el desarrollo”.

A este respecto, “Caritas Europa anima a los Estados miembros a establecer planes nacionales de acción plurianuales para sus propios objetivos de aprobación de AOD, así como a adoptar legislación vinculante sobre este capítulo”.

En cuarto lugar, pide “reconocer el valor añadido de una sociedad civil activa y eficaz”. En este sentido, “Caritas Europa invita al Consejo a manejar el lenguaje y las acciones específicas necesarias para promover la participación social y aumentar la eficacia de las organizaciones de sociedad civil”.

Por último, propone “asegurar la coherencia de las políticas para el desarrollo en todas las etapas, a fin de garantizar que las contribuciones a los fondos de ayuda alcancen el máximo impacto en su objetivo de desarrollo a través de la reducción de la pobreza”.

Por ello, “Caritas Europa subraya la necesidad de que, para tal fin, se establezcan tanto entre las instituciones europeas como en el seno de cada uno de los Estados miembros sólidos mecanismos institucionales que garanticen esa coherencia”.

Como señaló Marius Wanders, secretario general de Caritas Europa, “estas recomendaciones se basan en la amplia experiencia adquirida por Caritas en su trabajo de ayuda a las personas más vulnerables en todo el mundo. Para estos seres humanos, los ODM no son tanto una cuestión de credibilidad de la UE a la hora de cumplir sus compromisos, como una cuestión de supervivencia básica”.