CIUDAD DE MÉXICO, 4 dic (ZENIT.org).- El cardenal Norberto Rivera Carrera negó ayer que el presidente mexicano Vicente Fox Quesada esté «abusando» de los símbolos religiosos y mostró su satisfacción al ver que se abre la esperanza de solución para el conflicto de Chiapas.
El arzobispo de la capital mexicana, en referencia a la visita que hizo Fox, antiguo empresario de 58 años, a la Basílica de Guadalupe dos horas antes de que el 1 de diciembre tomara oficialmente poderes, consideró que el gesto no es más que una expresión que todo mexicano tiene derecho a hacer.
«Cuando un presidente, un gobernador o un legislador expresan públicamente su fe para nada rompen con el Estado laico –aclaró–. Hay que convencernos que el presidente no es el Estado. ¡Imagínense a dónde llegaríamos si el presidente nos dice en este momento que él es el Estado! El Estado laico sigue, pero cada persona tiene derecho a manifestar su fe, es un derecho irrenunciable», añadió.
El cardenal considera que es una noticia «excelente» la apertura del Ejército Zapatista de Liberación Nacional, sublevado en Chiapas, a negociar con el nuevo gobierno de Vicente Fox. Ahora bien, recordó que el Congreso de la Unión es la instancia responsable de dar a México una legislación «para todos nuestros hermanos indígenas». «No se puede legislar desde la selva, ni desde un pequeño grupo», añadió.
El cardenal Rivera Carrera mostró la disponibilidad de la Iglesia para ayudar a promover la paz en el Estado de Chiapas, levantado en armas en 1994, desde el campo que le es propio. Asimismo dejó claro que «no estamos ofreciendo nada para ocupar un lugar en esas conversaciones, si alguien necesita de nosotros nos llamará a su debido tiempo».
El Ejército Federal mexicano levantó el 1 de diciembre algunos de los retenes de tropas que tenía instalados en los poblados del municipio chiapaneco de Las Margaritas, cercano a uno de los principales bastiones de los zapatistas.
Este movimiento militar se produjo en el mismo momento en que Vicente Fox se comprometía a enviar mañana al Congreso la iniciativa de paz para Chiapas elaborada, y apenas un día antes de que el subcomandante Marcos, líder zapatista, ofreciera una rueda de prensa en la que fijará la postura zapatista aperturista ante el nuevo Gobierno.
Por lo que se refiere a la elección de Fox, primer presidente mexicano que no proviene de las filas del Partido Revolucionario Institucional después de más de setenta años, añadió: «con la decisión que tomó la población de cambiar de régimen, también la esperanza está latente, se está expresando, es explosiva en momentos y creo que eso ayuda mucho a México para resolver cualquier problema».