Además de extenderse por Gran Bretaña, la red de pedofilia tenía tentáculos en Estados Unidos, España, Israel, Bélgica, Canadá, Rusia, Suecia, Taiwán, Portugal, Francia, Alemania, Italia, Japón, Corea del Sur, Holanda, Nueva Zelanda, y Turquía.
La policía de Inglaterra y Escocia registró las viviendas de supuestos pederastas en Gran Bretaña y confiscó material informático, añadió la cadena, que afirmó se trata de un operativo sin precedentes.
La policía británica, a través de su Servicio Nacional contra el Delito (NCS, siglas en inglés), siguió de cerca a usuarios de portales de Internet especializados en suministrar imágenes de pornografía infantil, señaló la emisora británica.
Los responsables de la investigación creen que detrás de los detenidos hay grupos organizados.