CIUDAD DE GUATEMALA, 30 julio 2002 (ZENIT.org).- Juan Pablo II exhortó este martes a las comunidades indígenas a tomar el papel que les corresponde en la sociedad durante la ceremonia de canonización del Hermano Pedro de San José de Betancur, en la que participaron casi 800.000 personas, en la capital guatemalteca.
«El Papa no os olvida y, admirando los valores de vuestras culturas, os alienta a superar con esperanza las situaciones, a veces difíciles, que atravesáis», dijo el pontífice durante la homilía, dirigiéndose a los indígenas presentes de los diferentes países de América Central, en su mayoría mayas.
«¡Construid con responsabilidad el futuro, trabajad por el armónico progreso de vuestros pueblos! --añadió-- Merecéis todo respeto y tenéis derecho a realizaros plenamente en la justicia, el desarrollo integral y la paz».
Poco antes, el Evangelio había sido leído en cakchiquel, idioma común entre los indígenas guatemaltecos.
En Guatemala, país de casi 13 millones de habitantes, que ha sufrido 36 años de guerra civil concluidos en 1996, el mensaje del pontífice tuvo particular eco, sobre todo si se tiene en cuenta que el 60% de su población es indígena.
Las comunidades indígenas pagaron un duro precio durante el conflicto interno no sólo en miles de vidas masacradas, sino también cuando cientos de miles tuvieron que refugiarse en el sur de México para huir de la violencia.
El pontífice, canonizará este miércoles en México al primer indígena de América Latina, Juan Diego, testigo de las apariciones de la Virgen de Guadalupe, y el jueves beatificará a dos indígenas mártires de Oaxaca.
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Jul 30, 2002 00:00