El encuentro, convocado por el Consejo de Conferencias Episcopales de Europa (CCEE) y el Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), afrontará en particular la grave crisis de algunos países de América Latina, en particular las de Bolivia, Colombia, Venezuela y Argentina.
La reunión episcopal, que concluirá el 1 de marzo, estudiará en particular los flujos migratorios hacia Europa que pueden generar estas situaciones, conscientes de que podrían implicar para los obispos del viejo continente un importante compromiso pastoral de acogida.
Esta situación de inestabilidad social puede serr motivo también de crecimiento para movimientos religiosos alternativos, según constata «Radio Vaticano» al dar la noticia.
Ambos fenómenos, según los obispos, interpelan a la Iglesia, que debe responder con un renovado empuje misionero en el anuncio del Evangelio.