La idea partió de un sacerdote católico de 33 años, el padre Matthew Cho Myeong-yeo, quien en julio del 2001 comenzó a añadir a su lista de direcciones de e-mail a todos los que quisieran recibir sus mensajes.
El joven sacerdote estudiaba entonces para trabajar en la Oficina de Comunicaciones Sociales de la diócesis de Inchon, que hoy preside.
«Trabajando ante un ordenador desde las 7 de la mañana hasta las 10 de la noche –recuerda el sacerdote– pensé en dedicar este tiempo al servicio de cuantos a través de una palabra de ánimo o un mensaje del amor de Dios pudieran redescubrir la belleza de la vida, saborear la felicidad y acercarse de nuevo a la fe».
«Escribe cinco razones por las cuales eres feliz de vivir hoy»; «reconoce un milagro que haya sucedido a tu alrededor»; «emplea una hora de tu jornada para ayudar al prójimo»; «haz ahora cinco minutos de silencio y de oración».
Con estos mensajes del padre Mattew, los jóvenes y estudiantes han hallado motivaciones y estímulos para considerar los aspectos de la vida y acercarse a la fe.
Su servicio se conoce como «La Buena Nueva» en un sitio web gestionado por la archidiócesis de Seúl, uno de lo más visitados en Corea.
Corea del Sur es uno de los países con mayor número de nodos de Internet en el mundo. Cerca del 60% de la población de más de 6 años de edad utiliza Internet al menos una vez al mes.