BAGDAD, 16 noviembre 2003 (ZENIT.org).- En medio de los continuos atentados que tienen lugar en Irak, el nuncio apostólico de Juan Pablo II en el país, el arzobispo Fernando Filoni, asegura que la población condena el terrorismo.
El prelado italiano, uno de los pocos representantes diplomáticos que se quedó en Bagdad incluso durante los bombardeos de la segunda guerra del Golfo por indicación del Papa, explica: «la inmensa mayoría de la gente no acepta ninguna forma de terrorismo».
«Obviamente la población ha sido víctima de tantos problemas en el pasado y de tantas dificultades. Ha sufrido muchísimo. Está claro que es una población a la que no le gusta ver todo esto y cuya auténtica aspiración es una convivencia pacífica en la que se respete a todos, es decir, una vida mejor, una vida pacífica», afirmó este domingo en una entrevista a «Radio Vaticano».
El prelado explica que los atentados, como el del miércoles pasado de Nasiriya contra la base militar italiana, son perpetrados por aquellos que se oponen al cambio en Irak, no sólo contra los estadounidenses o contra la policía iraquí.
De este modo, añade, «se deja al pueblo en la incertidumbre, en la duda sobre el futuro».
«Las dificultades de estos largos meses llevan a la gente a considerar la presencia estadounidense como incapaz de resolver los profundos problemas de la sociedad», sigue constatando
Por este motivo, concluye, las fuerzas estadounidenses «han pasado de ser consideradas de liberación a ser percibidas como de ocupación».