Así lo confirmó monseñor Telesphore Mpundu, obispo de la diócesis de Mpika y presidente de la Conferencia Episcopal de Zambia (ZEC), resumiendo para la prensa las reflexiones de la última asamblea plenaria del organismo.
«Una situación –advierte el prelado– en la que el 80% de la población no dispone de ningún medio productivo para satisfacer las propias necesidades no puede sino describirse como crisis», recoge «Misna» este martes.
«Pedimos al gobierno que haga todo lo posible para aliviar el sufrimiento de nuestra gente –expone–; en el presupuesto del Estado hay que dar la máxima prioridad a la cuestión social y a la ayuda a los pobres».
Además del alarmante nivel de pobreza en el país africano, los obispos se refirieron también a la campaña anticorrupción emprendida el año pasado por el actual presidente Levy Mwanawasa, que está afectando a gran parte de la clase dirigente vinculada al ex jefe de Estado Frederick Chiluba –en el gobierno de 1991 al 2001–.
«Esta campaña moralizadora es un desafío incluso para la Iglesia, que tiene el deber de formar a nivel personal y espiritual a la nueva clase dirigente, recordándole que el objetivo principal de la política es el bien del país y del pueblo», reconoció monseñor Mpundu.
Tras diez años de gobierno, el ex presidente Chiluba dejó el cargo en diciembre del 2001 a Mwanawasa. Este, en julio del 2002, en un encendido discurso frente al Parlamento, denunció un gigantesco círculo de corrupción acusando al ex presidente y a muchos de sus más estrechos colaboradores de la sustracción, en total, de una cifra equivalente a 80 millones de dólares.