El obispo de la diócesis argentina de San Luis, monseñor Jorge Lona, denunció un «nuevo ataque a la Iglesia católica» provocado por el Gobierno provincial.
En esta ocasión, el prelado a constatado la dimación pública «de la manera más virulenta posible» a los religiosos Terciarios Capuchinos (amigonianos) que tenían a su cargo la Colonia Hogar, hasta que el Poder Ejecutivo los relevó de esa responsabilidad.
El apoyo popular a los amigonianos ya se ha manifestado a través de dos «marchas del silencio» y se está organizando una próxima marcha.
A principios de febrero, el Gobierno Provincial denunció a los Terciarios Capuchinos por incumplimiento de sus funciones al frente de la Colonia Hogar y «con fundamentos falsos y difamatorios», resolvió intervenir el establecimiento y conminó a los religiosos a abandonarlo en cuarenta y ocho horas, en lo que el obispo de San Luis consideró como «una injusta y dolorosa voluntad de agravio».
«Ante la irresponsabilidad cada vez más agresiva y prepotente –añadió el prelado–, debemos responder con el sereno testimonio de la verdad de Cristo, en la fortaleza de la paz de Cristo».