CARACAS, jueves, 6 mayo 2004 (ZENIT.org).- Confirmando que la Iglesia en Venezuela asumirá un papel relevante en la lucha contra las violaciones de los derechos humanos en el país, el arzobispo de Coro, monseñor Roberto Lückert León, ha anunciado la creación de una Oficina Nacional para la Promoción del Respeto de los Derechos Humanos.
Los medios de comunicación venezolanos se hicieron eco de las declaraciones del prelado quien el pasado 22 de abril, al ser consultado sobre las recientes muertes de soldados víctimas de torturas ocasionadas por efectivos militares, anunció la creación de la mencionada Oficina «que se encargue de recibir estos casos que se presentan en el interior del país para hacerle seguimiento en Caracas».
También constató que en el sector castrense «hay una olla podrida que se está destapando».
«Hay muchos casos de abuso, no es imprudencia, como dice el ministro de la Defensa, Jorge Luis García Carneiro», alertó el arzobispo de Coro.
Igualmente advirtió que estos actos contra los derechos humanos en el ambiente militar están siendo manipulados para tratar de esconder la verdad.
El arzobispo añadió que las víctimas pueden acudir a la Conferencia Episcopal para solicitar asesoramiento o asistencia. «Un equipo de profesionales como sociólogos, abogados penalistas y constitucionalistas darán seguimiento a las denuncias», subrayó.
