BRUSELAS, domingo, 4 julio 2004 (ZENIT.org–Veritas).- A finales de este mes se iniciará la primera de la Rutas que los jóvenes de la Alianza Mundial de la Juventud emprenderán desde las «cuatro esquinas de Europa» para llevar al Parlamento Europeo un Manifiesto, en el que de forma conjunta expresarán su defensa de la familia.
La iniciativa «Europe4Family» tiene el patrocinio del Parlamento Europeo y «pretende fomentar la importancia y significado de la familia», tanto a nivel individual como social, influyendo en las decisiones públicas que a nivel nacional e internacional puedan afectarla.
Entre las felicitaciones llegadas de todo el mundo por esta iniciativa se encuentran las de numerosos prelados: el cardenal Antonio María Rouco, arzobispo de Madrid; monseñor Peter Zurbrigger, nuncio de los Países Bálticos; y monseñor Friedrich Wetter, arzobispo de Munich y Freising.
También han expresado su adhesión el Primer Ministro del Reino Unido, Tony Blair; el presidente de la República de Estonia, Arnold Rüütel; y la presidenta de la República de Letonia, Vaira Vike-Freiberga, entre otros altos mandatarios.
El proyecto reunirá a jóvenes de más de 30 países europeos, en total participarían más de 2.000, y unos 200 harían la ruta completa hasta Bruselas.
Los jóvenes se dirigirán a Bruselas en bicicleta a través de cuatro rutas, la primera de las cuales se iniciará el 30 de julio en Cabo da Roca (Portugal). Luego comenzarán la que se iniciará en Vilnius (Lituania) el 6 de agosto, la que empezará tres días después en Targu Mures (Rumanía) y la que saldrá el 16 de agosto desde Dublín (Irlanda).
En Bruselas, además de presentar el Manifiesto, los jóvenes tendrán ocasión de celebrar el 10 de septiembre, en el Parlamento, un día con diversos seminarios y conferencias a cargo de reconocidas personalidades.
Los jóvenes españoles podrán incorporarse a la Ruta llamada «Atlántica» a su paso por España (Jerez de la Frontera, Cádiz, Barbate, Algeciras, Marbella, Torremolinos, Valencia, Castellón, Peñíscola, Barcelona, Sant Celoni, Cassá, Figueras y Portbou)
Los jóvenes europeos quieren recordar -en el 10º aniversario del año de las Naciones Unidas por la Familia- que la familia es una escuela de la «más profunda humanidad; dentro de la que cada miembro aprende mejor lo que significa ser persona humana».
Como reza el Manifiesto de los jóvenes «cada miembro de la familia humana, desde la concepción hasta la muerte natural, experimenta el regalo del amor incondicional y duradero».
«A través de sus roles complementarios, el padre y la madre, iguales en dignidad, muestran a sus hijos que la libertad de la persona humana se vive de una manera mejor y más plena en la entrega de uno mismo».
El Manifiesto añade que «el amor verdadero que se recibe y se da libremente en la familia es un reflejo del amor trascendental que hace posible la realización integral de cada ser humano».
Mientras los jóvenes recuerdan que la familia sostiene a la civilización y a la cultura «al dar vida a la siguiente generación», piden «a las empresas, las artes y los medios de comunicación» que los apoyen «en la creación de un ambiente favorable a la familia» y a los políticos «que nos escuchen y respondan creando la estructura para una sociedad favorable a la familia».
Más información en http://www.europe4family.net
