Fallece el cardenal Hickey, arzobispo emérito de Washington

Juan Pablo II recuerda su compromiso en la enseñanza de la fe

Share this Entry

CIUDAD DEL VATICANO, lunes, 25 octubre 2004 (ZENIT.org).- Juan Pablo II ha recordado el compromiso «en la difusión del Evangelio» del cardenal James Aloysius Hickey, arzobispo emérito de Washington, fallecido este domingo a los 84 años.

En un telegrama enviado al cardenal Theodore McCarrick, sucesor den la archidiócesis de la capital estadounidense, el Santo Padre transmite su más sentido pésame «a todo el clero, religiosos y laicos de la archidiócesis de Washington» y recuerda «con gratitud el incansable compromiso del cardenal Hickey en la difusión del Evangelio, la enseñanza de la fe y la formación de los futuros sacerdotes».

«Me uno a vosotros para pedir que Dios, nuestro Padre misericordioso, le asegure la recompensa de sus esfuerzos y acoja su noble alma en la alegría y la paz de su reino eterno», añade el pontífice.

«A todos los reunidos para la solemne misa fúnebre, imparto de buen grado mi bendición apostólica en prenda de consuelo y de fuerza en el Señor», concluye el telegrama.

El cardenal Hickey nació en Midland, diócesis de Saginaw, el 11 de octubre de 1920. Tras estudiar en el Sacred Heart Seminary College de Detroit (Michigan), en 1946 concluyó la licencia en Teología en la Universidad Católica de América en Washington.

Ordenado sacerdote el 15 de junio del mismo año en la catedral de Saint Mary en Saginaw, su primer ministerio pastoral lo realizó con inmigrantes de lengua española en Michigan. En 1947 se fue a estudiar a Roma un doctorado en Derecho Canónico en la Universidad Pontificia Lateranense y otro en Teología en la Universidad Pontificia de Santo Tomás.

Al regresar a los Estados Unidos, en 1957, fue durante nueve años secretario del obispo de Saginaw, y después fundó y fue rector del Seminario de San Pablo, participando al mismo tiempo en el Concilio Vaticano II como perito.

Nombrado obispo auxiliar de Saginaw, en 1967, al año siguiente se convirtió en presidente del Comité para la Formación Sacerdotal de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos y consultor de la Congregación para la Educación Católica.

En marzo de 1969, fue nombrado rector del Colegio Pontificio de América del Norte en Roma, donde estudian los sacerdotes y seminaristas diocesanos estadounidenses.

De regreso a su país, en 1974, fue nombrado obispo de Cleveland, hasta que en 1980 fue nombrado arzobispo de Washington.

Fue miembro del Comité Central para el Año Santo de 1975 y en la Cuaresma de 1988 dirigió los ejercicios espirituales a Juan Pablo II y a la Curia Romana.

En ese mismo año el Papa le creó cardenal. Aceptó la renuncia como arzobispo de Washington en noviembre de 2000, por razones de edad.

Tras el fallecimiento del cardenal Hickey, el número de cardenales es de 187, de los cuales 122 son electores y 65 no electores (han cumplido los 80 años de edad).

Share this Entry

ZENIT Staff

Apoye a ZENIT

Si este artículo le ha gustado puede apoyar a ZENIT con una donación

@media only screen and (max-width: 600px) { .printfriendly { display: none !important; } }