ROMA, viernes, 29 octubre 2004 (<a href=»http://www.zenit.org/»>ZENIT.org).- Con ocasión de los 1650 años del nacimiento del obispo de Hipona, filósofo y teólogo, las reliquias de San Agustín estarán en Roma del 7 al 15 de noviembre en la basílica a él dedicada en Campo Marzio, y también en el Vaticano.
Fue el 13 de noviembre del año 354 cuando nació en la actual Argelia (África) este hombre considerado como uno de los más grandes pensadores de todos los tiempos. Después de una juventud desviada doctrinal y moralmente, se convirtió, estando en Milán, y el año 387 fue bautizado por el obispo san Ambrosio.
De vuelta a su patria, fue elegido obispo de Hipona. Durante los treinta y cuatro años en que ejerció este ministerio, fue un modelo para sus fieles, a quienes dio una sólida formación con sus sermones y sus numerosos escritos, contribuyendo en gran manera a una mayor profundización de la fe cristiana contra los errores doctrinales de su tiempo.
Está entre los Padres mas influyentes de Occidente y sus escritos son de gran actualidad, como sus «Confesiones». Murió en el año 430.
De la permanente actualidad del obispo de Hipona ya habló el Papa hace tres años, afirmando –al recibir a los participantes en el capítulo general de la Orden de San Agustín– que se trata de un maestro único para el hombre de hoy que busca a Dios a tientas.
«La experiencia de Agustín es semejante a la de muchos contemporáneos», aseguró Juan Pablo II el 7 de septiembre de 2001.
Roma celebrará el aniversario del nacimiento del doctor de la Iglesia con una semana de celebraciones, congresos y exposiciones programadas del 7 al 15 de noviembre, confirma el diario católico «Avvenire».
Durante esos días, se prevé que por una noche, la urna con las reliquias de San Agustín hagan una parada en la capilla privada de Juan Pablo II, como signo de la devoción y también de la importancia que el Santo Padre da al pensamiento del santo de Tagaste, a quien frecuentemente ha citado en los textos de su magisterio.
Hombre inquieto, «doctor de la Gracia» y padre de interioridad, San Agustín ha empapado con su pensamiento la cultura occidental y leerlo es descubrirlo contemporáneo. Es el convencimiento que ha llevado a la provincia agustiniana de Italia y a al Orden de San Agustín a organizar esta semana de celebraciones bajo el lema «San Agustín entre nosotros».
Sus restos llegarán a Roma desde Pavía el 7 de noviembre y serán acogidos en la basílica de San Agustín de Campo Marzio donde el prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, el cardenal José Saraiva Martins, presidirá las Vísperas.
Hasta el 15 de noviembre cada día se dedicará a una «categoría»: cardenales y obispos residentes en Roma, diócesis de Roma, universidades, jóvenes, políticos, religiosos agustinos, familias y ciudad de Ostia. Ésta recientemente ha elegido a San Agustín como patrono, y también allí se celebrará un congreso sobre la actualidad de esta figura de la Iglesia universal.
Cada jornada se celebrará una Eucaristía conclusiva. Las presidirán, entre otros, el prefecto de la Congregación vaticana para los obispos –el cardenal Giovanni Battista Re–, el prefecto de la Congregación para la Educación Católica –el cardenal Zenon Grocholewski–, el secretario de Estado vaticano –el cardenal Angelo Sodano— y el presidente del Consejo Pontificio para la Familia, el cardenal Alfonso López Trujillo.
Entre las iniciativas musicales programadas, el 8 de noviembre el maestro y compositor monseñor Marco Frisina –director de la Oficina Litúrgica de la Diócesis de Roma– dirigirá el concierto «Agustín encuentra a Mónica».
El día 11, las reliquias del obispo de Hipona serán trasladadas al Instituto Patrístico Augustinianum, donde será dedicada el Aula Magna al fundador Agostino Trapè y presidirá las Vísperas el presidente del Consejo Pontificio para la Cultura, el cardenal Paul Poupard.
Como se ha mencionado, las reliquias serán después acogidas en la capilla privada del Papa. Esa noche, una marcha de jóvenes con antorchas partirá de la iglesia de Santa Inés –en la plaza Navona– para llegar a la basílica de San Agustín.
La Federación de monasterios agustinos de Italia animará una vigilia de oración el 13 de noviembre, y el día siguiente las reliquias viajarán a la localidad de Ostia: en la iglesia de Santa Áurea el cardenal Joseph Ratzinger –prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe– presidirá la Eucaristía. El 15 de noviembre tendrá lugar la despedida de las reliquias.