JERUSALÉN, viernes, 29 octubre 2004 (ZENIT.org–Veritas).- El secretario de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Juan Antonio Martínez Camino, afirmó en Jerusalén, con motivo de la peregrinación institucional de la CEE a Tierra Santa, que las peregrinaciones de los cristianos a Tierra Santa, «precisamente por venir con ánimo de paz», podrían suponer «una gran ayuda al avance de la paz en la región».
Respecto a la situación del conflicto de Oriente Próximo, Martínez Camino afirmó que precisamente por su larga duración en el tiempo, la situación «es difícil», aunque afirmó que los cristianos locales «no se muestran absolutamente pesimistas al respecto», y añadió que la resolución del conflicto «pasa por tratar con justicia a las personas, es decir, por el respeto de los derechos humanos, así como la solución de los problemas de convivencia».
Según el secretario de la CEE, la peregrinación de los obispos «responde a tres objetivos: la peregrinación en sí como itinerario espiritual, el animar a los peregrinos a que acudan a los Santos Lugares, y animar a la comunidad cristiana local», y afirmó que «es muy importante que no desaparezcan las comunidades cristianas, aunque sigan estando las piedras de los Santos Lugares».
Martínez Camino explicó que los cristianos tienen dificultades «por ser un grupo minoritario cada vez más pequeño», a lo que hay que añadir «la desaparición de los peregrinos desde el año 2000», pues «la presencia de éstos es importante no sólo por la cuestión económica, sino sobre todo como apoyo moral».
A pesar de las dificultades, Martínez Camino reconoció que las relaciones de la minoría cristiana con los gobiernos palestino e israelí «no son malas», y que el gobierno de Israel apoya muchas obras sociales de los cristianos, aunque al ser muchos de éstos palestinos, «están también sometidos a restricciones».
Por otro lado, informó de una serie de iniciativas puestas en marcha por la Conferencia Episcopal Española para ayudar a los cristianos locales: «a través del Fondo Nueva Evangelización, las diócesis españolas van a colaborar en una serie de proyectos concretos, entre ellos un colegio mixto para árabes y cristianos en Jerusalén», así como la próxima puesta en marcha en la localidad de Ein Karem de una exposición permanente que recoja la historia de las relaciones entre España y Tierra Santa, a través de la Fundación Obra Pía.
Además destacó otros vínculos españoles con Tierra Santa, como «la Domus Galilaeae, que hemos visitado durante esta tarde, y que lleva el Camino Neocatecumenal, con una significativa aportación española, o la Custodia de Tierra Santa, en la que también hay una importante representación española».
«El vínculo entre las Iglesias de España y Tierra Santa es antiguo y estrecho. Los cristianos locales han agradecido mucho esta peregrinación institucional, y por eso pedimos a los peregrinos españoles que vengan, pues aparte de los problemas económicos, las comunidades cristianas de aquí necesitan ver que no están solas», constató
La delegación de los obispos se encontró este viernes con el Patriarca latino de Jerusalén, Su Beatitud Michel Sabbah.
Durante el encuentro, monseñor Elías Yanes, arzobispo de Zaragoza, pronunció un discurso en el que expresó el compromiso de los obispos españoles de «sensibilizar a nuestros fieles para la realización en Tierra Santa de la paz, de la justicia, de la reconciliación y del perdón».
Monseñor Yanes explicó que esta peregrinación responde al ruego del Patriarca de acudir «en ayuda de los católicos que viven y sufren en esta tierra, para que los católicos de las diócesis de la Iglesia en España, vean que se puede peregrinar a Tierra Santa, con alguna dificultad, pero también con libertad».
El prelado recordó también «el mensaje de la Conferencia de obispos de rito latino de las regiones árabes y la Conferencia de obispos de la región del norte de África [publicado el 15 de octubre], a todos los hermanos en el episcopado del mundo, en el que afirman que el conflicto de Tierra Santa concierne a todo cristiano».
Los obispos han entregado al patriarca y a los obispos católicos de Tierra Santa una aportación económica en nombre de la Conferencia Episcopal Española.
Forman parte de la peregrinación el cardenal Ricard María Carles Gordó, arzobispo emérito de Barcelona; los arzobispos eméritos de Urgel y Castrense, monseñor José Manuel Estepa Llaurens y monseñor Joan Martí Alanis, respectivamente, y los Arzobispos de Zaragoza, Toledo y Mérida-Badajoz.
También participan el obispo de Vitoria, monseñor Miguel Asurmendi, y los obispos auxiliares de Barcelona y Madrid, monseñor Joan Carrera Planas y monseñor César Augusto Franco Martínez. El Guía de la peregrinación es el agustino Florentino Díez Fernández.