CIUDAD DEL VATICANO, viernes, 18 febrero 2005 (ZENIT.org).- El nuevo libro de Juan Pablo II, «Memoria e identidad» saldrá a las librerías el próximo 23 de febrero, con algo de anticipación respecto a las primeas previsiones.
La editorial italiana Rizzoli que detenta los derechos internacionales ha anunciado que el volumen será presentado el día anterior por el cardenal Joseph Ratzinger, prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, por Joaquín Navarro-Valls, director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, y por Paolo Mieli, director del diario «Il Corriere della Sera».
Será publicado contemporáneamente en castellano por la editorial La esfera de los libros, que considera la obra como «un libro esencial» «sobre cuestiones concretas ineludibles que caracterizan a la sociedad contemporánea».
En el volumen, según las primeras indiscreciones, el Papa debería ofrecer una narración en primera persona del atentado del 13 de mayo de 1981 en la Plaza de San Pedro del Vaticano a manos del turco Alí Agca, acompañado por reflexiones.
El libro, en el que el Papa afronta los temas más importantes ligados a la historia del siglo XX, surgió de una larga conversación que mantuvo en 1993 con dos profesores de filosofía polacos, Krzysztof Michalski y Jozef Tischner, en la residencia pontificia de Castelgandolfo.
Michalski fue uno de los tres jóvenes –junto a Cornelia Klinger y Klaus Nellen– que hace más de dos décadas fundaron el Instituto para las Ciencias Humanas en Viena (Austria), gracias a la ayuda del filósofo y sacerdote Tischner –fallecido en 2000–, cuya amistad con el Papa se remonta a los tiempos en Cracovia.
Los dos intelectuales, Michaslki y Tischner, «hacían preguntas al Santo Padre y él respondía», explicó Navarro-Valls al presentar el volumen el 6 de octubre pasado en la feria internacional de Francfort.
La conversación fue grabada y posteriormente transcrita. El manuscrito se guardó varios años hasta que el Papa volvió a leerlo y decidió convertirlo en libro tras hacer algunas correcciones.
La democracia contemporánea, la libertad humana, los conceptos no idénticos de nación, de patria y de Estado, las relaciones más que funcionales entre nación y cultura, los derechos humanos y la relación entre Iglesia y Estado son temas que aborda Juan Pablo II en este tomo, según Navarro-Valls.
El hilo conductor es el mismo del pensamiento de Juan Pablo II: el gran misterio del ser humano, tema siempre presente en toda la obra filosófica y literaria de Karol Wojtyla, así como en sus escritos magisteriales.
Juan Pablo II escribe sobre las ideologías del mal, el nacionalsocialismo y el comunismo, busca las raíces de las mismas y de los regímenes a los que dieron origen.
Asimismo, hace una reflexión teológica y filosófica acerca de cómo la presencia del mal muchas veces termina siendo una invitación a hacer el bien. «Sucede que el mal, en ciertos momentos de la existencia humana, se revela como útil. Útil en la medida en que crea una ocasión para hacer el bien», dice el Papa en un fragmento de su libro.
Juan Pablo II ha sido el primer Papa que publica libros recurriendo a los canales comerciales habituales. «Memoria e identidad» es el quinto libro que escribe durante su pontificado.
El año pasado publicó «¡Levantaos! ¡Vamos!», a través de cuyas páginas el Santo Padre narra los veinte años de su ministerio como obispo en Polonia, desde su ordenación en 1958 hasta su elección al pontificado, en 1978.
En 2003 publicó una obra de poesías, «Tríptico Romano», en la que medita sobre la vida y la muerte, recuerda su elección a la Sede de Pedro en la Capilla Sixtina y habla del día en que los cardenales se reunirán para nombrar a su sucesor.
«Don y misterio» se publicó en noviembre de 1996, en las bodas de oro sacerdotales de Juan Pablo II. En el volumen, el Papa cuenta el origen de su sacerdocio y experiencias de este ministerio.
En 1994, publicó «Cruzando el umbral de la esperanza», un volumen-entrevista firmado junto al periodista católico italiano Vittorio Messori.
Las entradas que el libro por razones de derechos de autor serán destinadas por el Santo Padre a obras de caridad, según han comunicado fuentes vaticanas a Zenit.