CIUDAD DEL VATICANO, miércoles, 1 junio 2005 (ZENIT.org).- Benedicto XVI recordó este miércoles que el mes de junio está particularmente dedicado al Sagrado Corazón y propuso en particular a jóvenes y enfermos que aproveche esta oportunidad para descubrir el amor de Cristo.
Al final de la audiencia general, celebrada en la plaza de San Pedro del Vaticano, el Santo Padre recordó –hablando en castellano– que «el próximo viernes es la fiesta del Sagrado Corazón de Jesús» e invitó a pedirle «que nos ayude a amar a nuestros hermanos como él nos amó».
Esta fiesta se promulgó en recuerdo de las apariciones de Cristo a santa Margarita María de Alacoque (1647-1690), religiosa de la Visitación en la localidad francesa de Paray-le-Monial, en las que le confesó su dolor por los pecados y sacrilegios de la humanidad.
Antes de despedirse de los 25.000 peregrinos presentes, el Papa volvió a tomar la palabra para saludar de manera particular a los jóvenes, los enfermos y los recién casados.
«Comenzamos hoy el mes de junio, dedicado al Sagrado Corazón –recordó–. Detengámonos con frecuencia a contemplar este profundo misterio de Amor divino».
«Queridos jóvenes, en la escuela del Corazón de Cristo aprenderéis a asumir con seriedad las responsabilidades que os esperan», les recomendó.
Dirigiéndose a los enfermos, muchos de los cuales se encontraban entre las primeras filas, les invitó a encontrar «en este manantial infinito de misericordia la valentía y la paciencia para comprender la voluntad de Dios en toda situación».
«Y vosotros, queridos recién casados, permaneced fieles al amor de Dios y testimoniadlo con vuestro amor conyugal», dijo por último.
Es posible visitar el Santuario de Paray-le-Monial en http://www.sanctuaires-paray.com.