COLONIA, jueves, 2 junio 2005 (ZENIT.org).- De 130 países proceden los numerosos jóvenes que vivirán en diócesis alemanas los «Días de encuentro» previos a la XX Jornada Mundial de la Juventud (Colonia).
Superando expectativas, se aproximan a las 230 mil las inscripciones para alojar a los jóvenes peregrinos con ocasión de la JMJ en Colonia (15-21 agosto) y de los Días de encuentro (11-15 agosto) que se celebrarán en las distintas diócesis de Alemania.
A la oficina de la organización en Colonia han llegado por ahora 2.234 acuerdos de hermanamiento, confirma la página www.gmg2005.it –promovida por el servicio nacional para la pastoral juvenil de la Conferencia episcopal italiana–.
Ante la elevada cifra, monseñor Georg Austen, secretario para la JMJ de la Conferencia episcopal alemana, mostró su satisfacción.
«Hemos recibido propuestas de hermanamiento de más de 130 naciones; esto demuestra cómo comunidades, asociaciones y grupos están estrechamente entrelazados en la Iglesia mundial y cómo el intercambio internacional es una buena tradición justamente en la pastoral juvenil», constató.
«Estamos también agradecidos por el apoyo y las muchas iniciativas de solidaridad que permitirán también a los jóvenes procedentes de países económicamente más necesitados participar en la JMJ», subrayó el prelado.
Durante los Días de encuentro, las diócesis invitan a los jóvenes huéspedes de todo el mundo a conocer la vida cristiana y social del lugar.
Constituyen «una ocasión para el encuentro interpersonal, la oración y la participación en la Misa, pero también para compartir los ratos de tiempo libre y para visitar los atractivos de la región», explicó monseñor Austen.
«Esperamos 250 mil participantes en los Días de encuentro», apuntó.
«Se nos ha comunicado la enorme disponibilidad a acoger a los huéspedes en las distintas diócesis, que están ofreciendo una capacidad de acogida superior respecto al número de participantes que nos esperamos», informó el prelado.
«Naturalmente esperamos que en estos encuentros también tomen parte, además de los huéspedes internacionales, muchos jóvenes alemanes, para después ir todos juntos a la XX Jornada en Colonia», puntualizó.
Alojamientos particulares de personas y familias acogerán a los jóvenes durante los Días de encuentro del 11 al 15 de agosto.
Cada diócesis prepara un programa para esos días en colaboración con las instituciones que promueven actividades para jóvenes, de forma que puedan descubrir la belleza de las distintas regiones. Cada programa se puede consultar en los sitios creados al efecto en la página oficial de la JMJ: www.wjt2005.de.
El 12 de agosto se ha reservado para el «Día del servicio social» con el que, explicó monseñor Austen, «queremos dejar un signo de solidaridad, para poner de relieve el compromiso de la Iglesia al servicio». Se trata de una extensión de las actividades de ayuda en Alemania llevada a cabo por los jóvenes de las parroquias y sus huéspedes internacionales.
La JMJ «vive de la colaboración entre tú y los jóvenes que de todo el mundo vendrán a Alemania. Juntos podéis moveros y cambiar algo. “Actuad para construir la civilización del amor y de la justicia”, es la invitación del Papa Juan Pablo II a los jóvenes en el Ángelus durante al JMJ de Toronto», recuerdan los organizadores.
El Día del servicio social quiere retomar esta invitación en una acción a nivel nacional como «un signo luminoso dentro de los Días de encuentro en las diócesis alemanas», proponen.
«El objetivo de la acción será emplear cinco horas y hacer juntos –huéspedes y anfitriones— algo por los demás. Buscamos reunir un millón de horas utilizadas en el servicio social», anuncian.
Con el término «Underconstruction» se designa la jornada del 12 de agosto; «Underconstruction – ¡Construye con nosotros un mundo más justo!» es su lema. Y es que «underconstruction» quiere decir «en construcción», o bien, «un estado permanente en que se encuentran la Iglesia, la sociedad en la que vivimos y todo el mundo», explican los organizadores.
«Por esto se necesitan personas que estén dispuestas a todo para construir una civilización del amor y de la justicia comenzando, por ejemplo, por la propia parroquia», añaden.
«El Día del servicio social une, compromete y llama a todas las instituciones encargadas del trabajo con jóvenes (asociaciones, órdenes, congregaciones, movimientos religiosos, asistencias a los jóvenes, trabajo social con jóvenes y otras más) a la acción conjunta con los huéspedes y de este modo preparar el camino a Colonia. Con la acción “underconstruction” construiremos conjuntamente una red solidaria», expone la organización.
Y «la acción del Día del servicio social en toda Alemania también se hará visible en Colonia», pues «los que hayan participado llevarán como símbolo una piedra a la JMJ»; mostrarán cuántos «han participado en la construcción de esta nueva civilización del amor y la justicia y su responsabilidad hacia otros. Con las piedras traídas se creará especialmente una representación conjunta. Piedra sobre piedra», confirman.
