Al despedirse de los peregrinos congregados en la plaza de San Pedro para rezar el Ángelus, el pontífice recordó que esta iniciativa busca «mantener los auténticos valores de la actividad deportiva».
«En particular –añadió–, este año se subraya el lazo entre el deporte y la naturaleza, según el tema escogido por la UNESCO [Organización de las Naciones para la Educación, la Cultura y la Ciencia] para esta Jornada Mundial del Ambiente».
«Deseo que el deporte practicado de manera sana y armoniosa a todos los niveles favorezca la fraternidad y la solidaridad entre las personas y el respeto y valoración del ambiente natural», concluyó el Papa.