ROMA, lunes, 17 julio 2006 (ZENIT.org).- Tras un delicado trabajo de restauración, el fresco anónimo del siglo XVII «La samaritana en el pozo» se expone por primera vez al público del 8 de julio al 10 de septiembre en el Museo Palazzo Braschi de Roma (Italia).
La obra corresponde a la segunda mitad del siglo XVII, entre 1654 y 1661.
Su origen está en el refectorio del Monasterio de Santa Eufemia en la iglesia de San Urbano de los Pantanos, un monasterio destruido durante los trabajos de excavación de los Foros Imperiales en la época del fascismo.
El fresco representa el encuentro entre Jesús y la Samaritana en el pozo de Sicar, narrado en el Evangelio de Juan.
Fue separado de la pared en la que estaba plasmado antes de que la iglesia fuera derribada.
Desde 1993 el fresco se conserva en el Museo de Roma – Palazzo Braschi.
«El violento arranque que sufrió la obra comprometió seriamente el estado de conservación, pero hoy la obra que reproduce el encuentro entre Jesús y la mujer samaritana a la que Él recondujo a un estilo de vida más sobrio ha vuelto a su aspecto original», expresó durante la rueda de prensa de presentación Isabella Colucci, de la Oficina de Restauración, Exposiciones y Préstamos de Roma.
Por su parte, Carla Tomasi, autora de la restauración, ilustró las condiciones del fragmento: «Se había perdido casi el 20% de la superficie pictórica»; «la calidad material era buena, a pesar del dramático trato que sufrió en el arranque en 1933».
«Es una obra preciosa restituida al público después de un trabajo atento» –declaró en la presentación a los periodistas Gianni Borgna, asesor de las Políticas Culturales del Ayuntamiento de Roma–, «realizado con competencia, pasión, generosidad y sensibilidad gracias también a la Fundación Droghetti y a su importante ayuda al Ayuntamiento».
La iniciativa de restauración ha sido promovida por la Asesoría de Políticas Culturales y la Superintendencia de Bienes Culturales municipal.
