ROMA, viernes, 26 enero 2007 (ZENIT.org).- Brice de Malherbe, sacerdote diocesano di París, ha recibido la tercera edición del premio literario «Henri de Lubac», en reconocimiento a una tesis sobre el respeto de la vida humana.
Le entregaron el reconocimiento el 24 de enero el cardenal Paul Poupard, presidente del Consejo Pontificio de la Cultura, y Bernard Kessedjian, embajador de Francia ante la Santa Sede.
«El respeto de la vida humana en una ética de comunión. Una alternativa a la bioética a partir de la atención a las personas en estado vegetativo crónico», es el título de la investigación, publicada por la editorial «Parole et Silence», del sacerdote galardonado, profesor en la Facultad Notre-Dame de París, y director espiritual de seminaristas de esa diócesis.
La tesis ha sido dirigida por monseñor Livio Melina, presidente del Instituto Juan Pablo II para los Estudios sobre el Matrimonio y la Familia de la Pontificia Universidad Lateranense.
El padre Brice de Malherbe explicó que escogió el tema de su tesis después de haber vivido durante dos meses en un centro de asistencia a enfermos terminales.
El premio es instituido por la embajada de Francia ante la Santa Sede, donde tuvo lugar la ceremonia de entrega, y es asignado a la mejor tesis de doctorado en campo filosófico, teológico o espiritual, escrita en francés, y presentada ante una de las universidades pontificias de Roma. Es acompañado por una suma de 3.000 euros.
El embajador Kessedjian recordó que el cardenal Joseph Ratzinger fue el primer presidente del jurado y que el cardenal Poupard, quien le sucedió en la presidencia, es miembro del jurado desde el inicio, junto a los cardenales Georges Marie Cottier y Albert Vanhoye.
El trabajo del padre de Malherbe muestra las deficiencias de la bioética, tal y como es concebida en nuestra sociedad, para discernir el «recto actuar». Permite a la reflexión francófona tener acceso a otras reflexiones que se desarrollan en los Estados Unidos, según subrayó el cardenal Poupard y el jurado.
El premio dedicado al sacerdote Henri de Lubac S.I. (1896-1991), uno de los teólogos más grandes del siglo XX, inspirador del Concilio Vaticano II, creado cardenal por Juan Pablo II.