CIUDAD DEL VATICANO, lunes, 16 julio 2007 (ZENIT.org).- El 26 de octubre de 2007 será beatificado Franz Jägerstätter, el campesino austriaco que desafió a Adolf Hitler, reconocido como mártir por Benedicto XVI.
La beatificación será presidida en nombre del Papa por el cardenal José Saraiva Martins CMF., prefecto de la Congregación de las Causas de los Santos, en la catedral de la diócesis austriaca de Linz, que ha confirmado esta información.
Franz Jägerstätter, casado con Franziska y padre de tres hijos, fue decapitado el 9 de agosto de 1943, a los 36 años, por su oposición pública a Hitler y al nazismo en nombre de su fe.
Había sido reclutado por el ejército del Tercer Reich, pero él se opuso citando las palabras de san Pedro: «Hay que obedecer a Dios antes que a los hombres».
Había leído la encíclica «Mit Brenneder Sorge» de 1937 en la que el Papa Pío XI escribía: «Ningún poder coercitivo del Estado, ningún ideal puramente terreno, por grande y noble que en sí sea, podrá sustituir por mucho tiempo a los estímulos tan profundos y decisivos que provienen de la fe en Dios y en Jesucristo».
Fue guillotinado el 9 de agosto de 1943, en Berlín, en la misma cárcel en la que fue ahorcado el teólogo protestante Dietrich Bonhöffer.
En su testamento dijo: «Escribo con las manos atadas, pero prefiero esta condición a tener encadenada mi voluntad».
El 1 de junio Benedicto XVI autorizó la publicación del decreto que reconoce su martirio y que abrió las puertas a su beatificación.