LA PAZ, martes, 6 mayo 2008 (ZENIT.org).- El Gobierno boliviano excluyó la participación de la Iglesia en el proceso de diálogo por el hecho de que el cardenal Julio Terrazas votara en el referéndum autonómico del 4 de mayo. Ante lo cual un comunicado de la Conferencia Episcopal aclara que el cardenal, como ciudadano boliviano y cruceño, «tiene legítimo derecho de ejercitar su voto».
Para el Gobierno, la Iglesia Católica quedó al margen de una mediación en un eventual diálogo entre el Ejecutivo y los prefectos de las regiones autonomistas, a raíz de que su principal representante, el cardenal Julio Terrazas, participara en el referéndum del 4 de mayo.
«Nosotros esperábamos contar con la mediación de la Iglesia Católica para una negociación en los próximos días, pero lo cierto es que la Iglesia, por voluntad propia, ha dado un paso al costado y corresponde al Gobierno, a los prefectos y la oposición asumir la responsabilidad directa de gestionar el diálogo», señaló el 5 de mayo el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana.
El cardenal Terrazas había aceptado en marzo –tras reunirse con el presidente Evo Morales- que la Iglesia Católica facilitara el diálogo para resolver la crisis política.
El cardenal votó en el referéndum del Estatuto Autonómico y, según Quintana, este es un «apoyo explícito a la ilegalidad».
Por su parte, la Oficina de Prensa de la Conferencia Episcopal Boliviana dio a conocer el 5 de mayo una nota ante la opinión pública, «en respuesta a las recientes declaraciones del ministro de la Presidencia, en sentido de que la Iglesia Católica quedaría inhabilitada de realizar su servicio de facilitación del diálogo, por el hecho de que el Cardenal Julio Terrazas haya ejercido su derecho al voto en el referéndum de Santa Cruz».
En la nota aclaratoria la Conferencia Episcopal afirma que «el cardenal Julio Terrazas es ciudadano boliviano y cruceño y como tal tiene el legítimo derecho de ejercitar su voto».
«Esta responsabilidad ciudadana -añade– no es incompatible con su función de Presidente de la Conferencia Episcopal Boliviana y líder de la Iglesia Católica».
«Como él mismo ha señalado, en reiteradas oportunidades –concluye–, la Iglesia seguirá sirviendo a la población, velando por la unidad y el bien común de todos los bolivianos».
Por Nieves San Martín