CIUDAD DEL VATICANO, viernes 21 de agosto de 2009 (ZENIT.org).- El nuevo nuncio apostólico de Benedicto XVI en España reconoce que su misión no será fácil en una entrevista concedida 24 horas después de su nombramiento.
Monseñor Renzo Fratini, de 65 años, hasta ahora nuncio en Nigeria, ha confesado en declaraciones telefónicas a «Radio Vaticano» desde Abuya que no se esperaba este nombramiento del Papa.
«De todos modos, voy contento a esta nueva misión importante, en un importante país. Pero también con una cierta trepidación, pues no creo que sea fácil en este momento: por las relaciones con España y también por la situación en general».
«¡Por tanto –asegura–, trataré de hacerlo lo mejor posible!».
Además de Nigeria, el prelado ha sido nuncio apostólico en Timor Oriental, Indonesia y Pakistán, países que cuentan con una importante presencia musulmana.
En la entrevista explica que su sorpresa al recibir el nuevo encargo se ha debido precisamente a este motivo, pues ha dedicado más de quince años a naciones en los que la presencia musulmana era dominante o muy importante.
«Ahora regresamos a Europa», explica al ilustrar el cambio que experimentará su vida.
En Nigeria, explica el prelado italiano, la Iglesia es muy viva: «Les gusta rezar, se da una gran vitalidad. Quizá hace falta una profundización de la fe en la formación, pero en África la fe es muy viva. Las Iglesias están llenas, los seminarios están llenos hasta rebosar. Hay muchas vocaciones».
«Mientras que la Iglesia europea está algo cansada. Trataremos de hacer lo más posible, ayudar para reavivar y tratar de reanimar y alentar a la Iglesia de Europa, dando una pequeña contribución en lo que podemos a España, en este momento de crisis, de dificultades económicas y financieras».
«Por tanto, voy con gran entusiasmo y deseo de trabajar, pero también con una cierta trepidación, pues el momento no es fácil», concluye el arzobispo.