Hoy por la tarde el papa Francisco ha llamado por teléfono, por iniciativa propia, al presidente de Italia, Giorgio Napolitano, para agradecerle el telegrama de felicitaciones que recibió por su santo, que se celebró ayer, y para expresarle su aprecio, indicó un comunicado de la Santa Sede. Se da la circunstancia que ambos tienen por patrono al mismo santo.
“Le estoy llamando señor presidente –le dijo Francisco– para agradecerle su ejemplo. Usted para mi es un ejemplo. Con su comportamiento usted volvió vivo el principio fundamental de la convivencia: que la unidad es superior al conflicto. Estoy conmovido por su decisión”.
La reflexión del papa se refiere al gesto de Napolitano de aceptar un segundo mandato presidencial, a pesar de que al concluirlo había afirmado categóricamente que no aceptaría un bis. Ante una situación de empantanamiento general de las fuerzas políticas italianas, que a partir de las últimas elecciones políticas, con tres principales partidos en paridad de fuerzas, no lograron decidir más nada.
El haber vuelto atrás y haber aceptado un segundo mandato, a Napolitano permitirá encontrar salidas diversas, como las elecciones anticipadas.
El santo padre ya lo había felicitado a través de un telegrama enviado al Palazzo del Quirinale, tras su reeleción el pasado sábado.
Napolitano asumió la jefatura del Estado de Italia el 15 de mayo del 2006, como XI Presidente de la República Italiana, sucediendo en el cargo a Carlo Azeglio Ciampi y este 20 de abril fue el primer presidente reelegido.
El 4 de febrero pasado el presidente Napolitano encontró a Benedicto XVI, por 20 minutos en un coloquio privado antes de un concierto que Italia le brindó al santo padre, particularmente intenso pues se despidió porque terminaba su mandato de siete años. Ironía de la historia, menos de tres meses después, Benedicto es papa emérito y Napolitano fue reelegido presidente de Italia.
