Los obispos españoles ven un «avance positivo» en el anteproyecto de Ley de Protección de la Vida del Concebido y de los Derechos de la Mujer Embarazada con respecto de la normativa actual, “que reconoce el aborto como un derecho”.
Pero, en cualquier caso, recuerdan que una ley del aborto, «por muy restrictiva que fuera, seguiría siendo injusta». Así lo ha indicado hoy el secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal Española (CEE), el sacerdote José María Gil Tamayo, en la rueda de prensa posterior a la CCXXX reunión de la Comisión Permanente de la CEE, que ha tenido lugar en Madrid los días 28 y 29 de enero.
Respondiendo a las preguntas de los periodistas, Gil Tamayo ha explicado que “nadie tiene derecho, en ninguna circunstancia, a quitarle la vida a un ser humano inocente”. “El aborto no es la solución, de la misma manera que el niño que va a nacer no es el problema”, ha añadido. Con el drama del aborto “hemos llegado a una sociedad en la que, por desgracia, hemos perdido grados de valoración de la vida, perdiendo el tono moral”, ha lamentado.
Por este motivo, el secretario general de la CEE ha defendido una vez más “el valor sagrado de la vida humana desde la concepción hasta su fin natural», porque la posición de la Iglesia es “siempre a favor de la vida”. Además, esta postura es “compartida con otros hombres y mujeres de buena voluntad que sin ser creyentes defienden la vida como patrimonio común de la razón humana”, ha añadido.
El portavoz del episcopado ha afirmado también que “no es progresista pretender eliminar los problemas eliminando la vida humana”. Es más, «la defensa de la vida no es una cuestión conservadora, y la justicia social no es, en la Iglesia, una cuestión de progresismo”, ha apuntado.
Al ser preguntado por los abortos terapéuticos, Gil Tamayo ha contestado que «la opción por la muerte no sería el camino», porque daría lugar a «una sociedad de selección de la especie». «Yo tengo ahí, lo digo personalmente, una postura a ultranza de defensa de la vida absoluta. Abrir un camino y un resquicio supondría abrir una puerta a una línea eugenésica, porque luego entraríamos en los distintos tipos de calidad de vida», ha enfatizado.
En esta línea, «lo que hay que hacer es políticas sociales y leyes de acompañamiento en favor de los más necesitados y débiles. La eliminación de un ser inocente nunca es la solución, porque en ese caso acabaríamos en el mundo con el hambre eliminando a las personas y así se tocaría a más», ha asegurado.
En la reunión de la Comisión Permanente, los obispos han tratado también sobre la situación en la que queda la enseñanza religiosa en la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE), según ha informado la Oficina de Información de la CEE.
El episcopado ha valorado positivamente que se haya llevado a cabo la regulación de la religión católica en Educación Primaria y Educación Secundaria, y ha mostrado al mismo tiempo su insatisfacción con respecto a la regulación en el Bachillerato, porque no se garantiza la oferta obligatoria de la asignatura por parte de los centros ni tampoco que los alumnos puedan optar por ella.
Los prelados esperan que para que los padres puedan ejercitar su derecho de educar a sus hijos conforme a sus convicciones religiosas y morales, se dé, en el decreto de enseñanzas mínimas, el mismo tratamiento a la religión católica en Educación Infantil y en el Bachillerato que el establecido en Educación Primaria y Educación Secundaria, así como que se garantice en todas las etapas el horario equivalente a las materias específicas.
La próxima visita Ad Limina Apostolorum de los obispos españoles, programada del 24 de febrero al 8 de marzo de 2014, ha sido otro de los temas que ha tratado la Permanente.
Los prelados realizarán la visita en dos grupos, aunque coincidirán en Roma para celebrar el encuentro de todos los obispos españoles con el papa Francisco, que tendrá lugar en el Vaticano el lunes 3 de marzo a las 12 horas.
La Secretaría General de la CEE, junto con el Agente de Preces, está coordinando los distintos encuentros que se van a celebrar en Roma.
Está previsto que las audiencias con el Santo Padre tengan lugar cada día desde las 10,30 horas. El Pontífice recibirá a los obispos en grupos. Cada prelado presentará brevemente un informe sobre el estado de su diócesis, respondiendo a las preguntas que el Papa pudiera formularle.
Además del encuentro con el Santo Padre, que constituye el momento central de la visita, los obispos españoles se entrevistarán con los responsables de los diversos dicasterios de la Curia Romana.
Los miembros de la Comisión Permanente también han aprobado el temario de la CIII Asamblea Plenaria, que tendrá lugar en la Casa de la Iglesia de Madrid del 11 al 14 de marzo.
Los obispos han fijado el procedimiento que se va a seguir para la renovación de todos los cargos de la Conferencia Episcopal Española para el trienio 2014-2017, excepto el de secretario general, que ya fue elegido el pasado mes de noviembre, en este caso para un quinquenio (2013-2018).
Por último, el obispo de Ávila, Jesús García Burillo ha informado a los presentes sobre los preparativos para la celebración del V Centenario del Nacimiento de Santa Teresa de Jesús, que se cumple el 28 de marzo de 2015.
Para saber más: Nota de prensa final de la CCXXX reunión de la Comisión Permanente