Los directores de los religiosos camilianos están reunidos en Roma para reflexionar sobre los últimos episodios que involucraron a la dirección de la órden en una fea historia, con el deseo de hacer transparencia sobre lo ocurrido y realizar la limpieza necesaria, como quiere el papa Francisco para la Iglesia. Y sobre todo para entender cómo proceder en el futuro, en un panorama en el que la sanidad se ha vuelto muy complicada, que requiere mucha consultoría externa, y en el cual las circunstancias han cambiado mucho. Sin descartar la posibilidad de reveer la necesidad de las estructuras de la órden.

Los hechos
“El orden que desde hace 400 años se dirige a los enfermos le confió a un inquietante personaje, Paolo Oliverio, la gestión de la Orden fundada por San Camilo de Lelis. A través de cómplices de la Guardia de Finanza, los que terminaron presos, Oliverio organizó un falso interrogatorio de dos padres camilianos para tenerlos lejos del capítulo general y evitar así que votaran contra (la reelección) del padre Salvatore”. Así ayer describió la situación, RAI 2 en un servicio. Según un artículo del diario italiano Il Corriere della Sera, Oliverio era un colaborador de los servicios secretos que se puso por cuenta propia para realizar sus negocios ilegales.

ZENIT habló con el portavoz de los Camilianos, el hermano Carlos Mangioni, para dar a nuestros lectores una visión más clara sobre lo ocurrido.

Víctimas de un administrador deshonesto
“Nosotros somo víctimas a pleno título de este personaje porque desaparecieron más de diez millones de euros” dijo el portavoz y además porque ha causado “sufrimiento en el instituto y también la desorientación”. Al punto que “algunos sacerdotes ancianos al ver lo que decía el telediario se quedaron inmóviles sin poder ni siquiera levantarse de la silla, fue un shock muy fuerte”, dijo.

Deseo de transparencia
“Nosotros deseamos saber la verdad y esto significa la limpieza que quiere el papa Francisco", dijo. “Deseamos que la verdad venga a la luz y listos para retomar con un nuevo entusiasmo el camino indicado por San Camilo y encarnado a lo largo de la historia por tantas figuras luminosas. Por cuatro siglos hemos vivido así y queremos seguir haciéndolo”.

La cumbre en Roma
“La Consulta general, los superiores mayores y los delegados del Orden de los ministros de los enfermos se encuentran reunidos desde el domingo 12 hasta mañana miércoles 15 para reflexionar sobre los eventos relacionados al superior general, el padre Renato Salvatore, y juntos y con coraje tomar las debidas medidas operativas”.

“Esperaremos hasta mañana por la tarde para saber las conclusiones”, dijo fray Carlos, y precisó que ayer presidió la reunión el padre Sebastiano Paciolla; hoy monseñor José Rodriguez Carballo, y mañana miércoles el cardenal João Braz de Aviz”, respectivamente subsecretario, secretario y prefecto de la Congregación para los Institutos Consagrados y las Sociedades de Vida Apostólica.

“Queremos saber la verdad y también el grado de responsabilidad del padre general y claramente esta es una ocasión preciosa para la orden respecto a su gestión futura”. Esto, precisó “porque Oliverio no es el único laico que colabora con la orden. Hay cientos y cientos de laicos que colaboran como consultores”.

La necesidad de consultores externos en el universo actual de la sanidad
“Hoy la sanidad es un mundo demasiado complicado. Nosotros no podemos saber de todo. Por ello nos rodeamos de laicos y consultores. Esta vez nos tocó un consultor deshonesto que había obtenido nuestra confianza con poderes y autorizaciones para poder mover nuestras cuentas”.

"Paolo Olivero tenía que recuperar 17 millones de euros que la Región Campana, que le debían al hospital de Casoria. Durante muchos años no lográbamos desbloquear esta situación. Nos dirigimos al padre general pidiendo ayuda y él nos envió a Paolo Oliverio. Y Oliverio logró desbloquear ese dinero, y se encontró entre sus manos a todo ese dinero".

¿O sea que ese dinero no fue a parar al padre superior? Le preguntó ZENIT. "No, No son diez millones que terminaron en cuentas de otros países y hay una rogatoria internacional para entender a dónde fueron a parar esos millones" respondió el portavoz.

Resultados del proceso penal hará clareza
“Esperamos en resultado del proceso, porque quizás el padre general haya sido demasiado simple, imprudente, pero no queremos nosotros procesar a nadie sino que esperamos haya un resultado judicial que haga clareza”.

¿Rever las estructuras de la orden?
Estamos en 40 países del mundo y nunca tuvimos casos de este tipo. Quizás este caso se deba a que el mundo sanitario se ha vuelto muy complejo, también para nuestra preparación y esto nos lleva a abrirnos a profesionales. En cambio ahora quizás deberemos implantar una sana prudencia y esto lo está evaluando en al reunión".

“Quizás es el momento --indicó el portavoz-- de rever las estructuras del Orden. Nosotros nacimos hace más 400 años y hasta hace cien años atrás no teníamos ninguna estructura propia, por 300 años el orden trabajó en los hospitales públicos, a nivel domiciliario en el territorio”.

Y el portavoz recordó que “en el 1900 inicia la primera estructura, la Casa de Curación San Camilo de Cremona, y la finalidad era doble: permitir a nuestros religiosos hermanos de ejercitar el ministerio, porque los hermanos tenían dificultad de trabajar en las estructuras públicos. El otro objetivo era apoyar a las misiones a través de estas obras. Esto funcionó por unos 90 años, hoy no funciona más”.

El cambio en la legislación económica
El hermano Carlo reconoció entretanto que en las misiones sirve dinero para construir aunque, hoy la problemática ha cambiado: “Cuando se va a una tierra de misión como Benín en la que no hay nada, es claro que las estructuras de la orden de los países 'ricos' sostienen a estas misiones. Solamente que hoy por las leyes actuales se vuelve muy difícil mantener a las tierras de misión, porque no se puede hacer transitar dinero de obras comerciales a obras no comerciales”.

En el cuarto centenario un don doloroso
“Este problema lo tomamos también como un don doloroso en nuestro cuarto centenario, que nos permita ver tantas cosas, el gobierno del orden, la autonomía de una sola persona en tomar decisiones, etc. Con dolor pero con apertura a una visión diversa de gobierno”. Y concluyó que “con la cabeza alta, podemos decir que la orden presente en cuarenta países del mundo tuvo siempre como único interés el servicio del enfermo".