Miles de familias procedentes de todo el mundo se reunirán del 22 al 27 de septiembre de 2015 en Filadelfia, EEUU, para el VIII Encuentro Mundial de la Familia. Y en preparación a este gran encuentro, ha sido presentado esta mañana en la sala de prensa del Vaticano con la presencia de monseñor Vincenzo Paglia, presidente del Consejo Pontificio para la Familia; monseñor Charles Joseph Chaput, o.f.m. cap, arzobispo de Filadelfia; y el matrimonio Estauce y Susanne Mita.

Monseñor Paglia ha explicado que este evento se coloca en un momento particularmente importante para la vida de la Iglesia,  ya que "el papa Francisco ha querido poner al centro de la atención de toda la Iglesia precisamente el tema de la familia". Así, ha recordado que el pasado mes de febrero tuvo lugar el Consistorio sobre la familia, en octubre se celebrará el Sínodo extraordinario sobre "los desafíos pastorales sobre la familia en el contexto de la nueva evangelización", y en octubre de 2015 tendrá lugar la Asamblea General Ordinaria de los Obispos, también sobre la familia.

Asimismo, ha indicado que en este "itinerario eclesial" se inserta también el análisis y el debate que la ONU ha propuesto en este año con la convocatoria del año de la familia. "No se debe infravalorar la cercanía física entre el evento eclesial que tendrá lugar en Filadelfia y los debates que se están desarrollando en la sede central de las Naciones Unidas en Nueva York", ha indicado el prelado.

Por otro lado ha explicado que "el punto de inicio y de desarrollo de nuestro itinerario será siempre el que el papa Francisco nos ha indicado: 'la belleza de la familia y del matrimonio, la gran belleza de esta realidad tan sencilla como rica, hecha de alegrías y de esperanzas, de cansancios y de sufrimientos, como toda la vida. Buscaremos profundizar la teología de la familia y la pastoral que debemos tener en las condiciones actuales'". Acompañar a todas las familias del mundo con una "pastoral inteligente, valiente y llena de amor", es lo que monseñor Paglia ha dicho que se hará mirando hacia Filadelfia.

Para concluir su intervención, ha anunciado como novedad respecto a otros Encuentros Mundiales de la Familia, que en esta ocasión "queremos que la participación al evento implique de forma grande y activa también a las otras Iglesias y Comunidades cristianas, como también representantes de las grandes religiones mundiales junto también a hombres y mujeres humanistas que tienen en el corazón el destino de una humanidad pacífica y solidaria".

Por su parte, el arzobispo de Filadelfia, ha observado que el entusiasmo del Santo Padre por la vida y la preocupación por las necesidades de las personas "nos han inspirado a focalizarnos sobre nuestra misión común de amor, y sobre cómo amar a todas las familias y sus respectivos miembros". Tema, ha matizado, que están profundizando en una catequesis preparatoria no solo para los católicos sino también para todas las personas de buena voluntad. Además, monseñor Chaput ha confirmado que rezan con todo el corazón para que el papa Francisco pueda unirse a este celebración el próximo año.

A continuación ha explicado que este encuentro quiere ser un don no solo para los católicos de Filadelfia, sino para todas las personas de buena voluntad que quieran acudir al evento. "Todo el que tenga un corazón generoso será bienvenido, y en los meses futuros yo trabajaré en estrecha colaboración con mis hermanos en el episcopado, para animar a las familias de todo el mundo a venir a Filadelfia en el 2015", ha indicado.

Esta ciudad, ha precisado el arzobispo, es también un icono católico de los Estados Unidos, con dos grandes santos americanos. La madre Katharine Drexel pasó su vida al servicio de los afroamericanos y de los indios de Norteamérica. Y el obispo John Neumann creó escuelas parroquiales que se convirtieron en un modelo nacional y ayudaron a las familias inmigrantes pobres a educar a sus hijos. Además, ha querido recordar que la Iglesia de Filadelfia es una comunidad que tiene también una gran necesidad de renovación, tras la crisis de los abusos sexuales del pasado decenio. En este sentido Filadelfia "es una fotografía de la Iglesia a nivel mundial. Tenemos el deber de ayudar a las víctimas de abusos y sus familias a sanar, y proteger a los niños y a los jóvenes de los daños en los años venideros", ha afirmado el arzobispo.

Finalmente ha señalado que aún queda mucho por hacer para perfeccionar la estructura del evento pero quieren que este encuentro "sea un momento de esperanza y de alegría para todas las personas y todas las familias que están presentes". Y con este fin ha reunido a los mejores expertos que se puedan encontrar para "responder a los desafíos pastorales, sociales, económicos y culturales que las familias deben afrontar ahora". En definitiva, ha concluido el arzobispo, "nuestro objetivo es sencillo: queremos ayudar a las familias a reforzar su vida familiar de forma muy práctica".

Beato Diego José de Cádiz

«Apóstol de la misericordia, este gran capuchino, que solo quiso ser misionero santo, y aspiró a obtener la palma del martirio, fue también un gran orador. Menéndez y Pelayo lo situó detrás de san Vicente Ferrer y de san Juan de Ávila»