La población indígena de México representa 10 por ciento de la población total del país) 103 millones de personas) y la mayor parte de ella (entre 70 y 80 por ciento) carece de lo más elemental para vivir con dignidad.
De ahí la doble dimensión de este encuentro: la revisión de los últimos diez años de trabajos de la Iglesia católica en favor de los indígenas del país y la presencia de sacerdotes indígenas atendiendo sus solicitudes particulares, así como el fenómeno creciente de la emigración de indígenas mexicanos a los Estados Unidos.
El objetivo general del Encuentro es continuar y fortalecer la formación sacerdotal inculturada, prosiguiendo el diálogo del Evangelio con las culturas de México, para acompañar al emigrante indígena que se integra a otras culturas sin perder su identidad.
Los sacerdotes mexicanos quieren tomarle el pulso a los efectos de la globalización en las poblaciones y etnias indígenas de México (aproximadamente unas 50, de las cuales nahuatl, zoques, triques, chontales, tojolabales, tzotziles, tzeltales, lacandones, mayas, mixes, zapotecos y mixtecos, entre otros, habitan en el sureste del país), enfrentar el creciente abandono de los indígenas a sus tierras para irse al Norte y las formas con las que el catolicismo está siendo penetrado por las sectas, sobre todo en la región de Chiapas que, en el último censo de población (año 2000) era la única zona del país que no rebasaba el 65 por ciento de población católica.
Las estadísticas sobre el número de etnias reflejan 57 oficialmente reconocidas. Se hablan en el país 92 lenguas diferentes. Mientras la media en México de analfabetismo ronda el 10 por ciento, en las comunidades indígenas llega a 45 por ciento. El 75 por ciento de los indios mexicanos no acabó primaria.
Hay, aproximadamente, 200 sacerdotes indígenas en México y un número un poco mayor (220) seminaristas indígenas.