CIUDAD DEL VATICANO, martes, 1 febrero 2005 (ZENIT.org).- Juan Pablo II ha impulsado en este Año de la Eucaristía (octubre 2004-octubre 2005) la creación de una red mundial de oración por las vocaciones a la vida consagrada.
Esta red, animada por la Obra Pontificia para las Vocaciones Sacerdotales, dependiente de la Congregación vaticana para la Educación Católica, busca «crear, a través de turnos de oración en cada continente, un hilo de oración que una entre sí a las comunidades cristianas del mundo entero».
«Quisiera confirmar en este contexto que la Eucaristía es el manantial y el alimento de toda vocación sacerdotal y religiosa», explica el obispo de Roma en un mensaje dirigido este martes a la Congregación presidida por el cardenal polaco Zenon Grocholewski.
«Deseo, por tanto, expresar mi aprecio por toda iniciativa integrada en esta «red» de oración por las vocaciones, y espero que pueda abrazar al mundo», confiesa el pontífice.
El Papa alienta asimismo la obra de «quienes dedican tiempo y cansancio a promover una pastoral capilar de las vocaciones dentro de la comunidad eclesial».
En su misiva constata que un momento decisivo para entretejer esta red será el próximo 17 de abril, Jornada Mundial de Oración para las Vocaciones.
A inicios de enero el Vaticano publicó el mensaje que el Papa ha preparado para esa Jornada en 2005 que lleva por tema «Llamados a remar mar adentro».
Ese documento alienta a los jóvenes a responder a la llamada que Cristo a seguirle sin reservas y constata que el mundo necesita hoy «sacerdotes santos» y «personas totalmente consagradas al servicio de Dios».