La sangre de los mártires es semilla de cristianos, afirmaba Tertuliano y lo ha demostrado la historia bimilenaria de la Iglesia. Según las estimaciones de la Comisión Episcopal de la Unión Europea los cristianos perseguidos en el mundo son unos 200 millones. Sin poner en la cuenta Occidente, donde existe libertad de religión aunque con frecuencia los valores del cristianismo son cuestionados en nombre de una no muy precisada laicidad.
Según los datos del Anuario Estadístico de la Iglesia Católica, desde el 2005 hasta el 2013, los fieles católicos aumentaron de 1.115 millones a 1.229 millones, o sea del 10,2 por ciento.
Los datos indican que el área con más católicos es Europa con el 23 por ciento del total, aunque su crecimiento es menos dinámico respecto a las otras regiones del planeta.
El continente que más crece en número de católicos es África, a pesar de los terribles atentados que se registran en Nigeria; República Centrafricana; Kenya y Somalia. Los fieles pasaron del 13,8 por ciento del 2005 al 16,2 por ciento del 2012.
Con el 11 por ciento de católicos la otra área que registra un fuerte crecimiento de bautizados es Asia, que le sigue a África en el número de persecuciones. América Latina se consolida con el 49 por ciento de los católicos bautizados que hay en todo el mundo. Estable también se encuentra Oceanía.
Se habla mucho de la falta de vocaciones, si bien esta tendencia se registra solamente en el mundo occidental. Desde el 2005 al 2012 el número total de sacerdotes aumentó del 2 por ciento, siendo hoy 406.411.
Se registra también el crecimiento del número de las vocaciones en los seminarios, con un aumento en el mismo lapso de tiempo del 4.9 por ciento, llegando así a 120.051 seminaristas. En Asia aumentaron del 18 por ciento; le sigue África con un incremento del 17,6 por ciento y Oceanía con un aumento del 14,2 por ciento. En América la disminución ha sido del 2,8 por ciento, mientras en Europa las vocaciones sacerdotales han bajado del 13,2 por ciento.