CIUDAD DEL VATICANO, viernes 5 de noviembre de 2010 (ZENIT.org).- Benedicto XVI quiere llevar un mensaje de humildad y caridad este fin de semana en su peregrinación apostólica a Santiago de Compostela y Barcelona, asegura el portavoz vaticano.
«Hay infinitas cosas bellísimas que pueden decirse sobre este viaje del Papa a España», reconoce el padre Federico Lombardi, S.I., director de la Oficina de Información de la Santa Sede. En el último número de Octava Dies, semanario del Centro Televisivo Vaticano, subraya los principales aspectos.
Peregrino con los peregrinos
Hablando de la primera etapa, la tumba del apóstol Santiago, que visitará este sábado, el portavoz recuerda que «es la meta de un numeroso pueblo que se pone en camino, con humildad, en búsqueda. Innumerables itinerarios de personas, a través de los siglos, que reflexionan, rezan, se esfuerzan por volverse a encontrar consigo mismas y por encontrar a Dios».
«Infinitas vicisitudes diferentes de vida, con su secreto y su misterio profundo, confluyen en el gran río del pueblo en camino. El Papa hoy es peregrino con los peregrinos, como persona, y como pastor», sigue subrayando el director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede.
«Cuántas personas vagan sin encontrar la dirección y la meta –reconoce–. En el camino a Santiago muchos han encontrado una estrella, una meta. Junto al Papa, afrontamos con confianza nuestros caminos».
La Sagrada Familia, obra potentísima de fe y arte
A continuación, el sacerdote analiza la etapa de Barcelona, el domingo, y que tiene por objetivo la consagración de la Sagrada Familia, «epopeya de un pueblo humilde y numeroso».
«Es este pueblo el que la edifica lentamente con sus pequeñas contribuciones y su devoción, no son los grandes poderes de este mundo. Gaudí sigue siendo el alma de esta empresa, pero ésta va más allá de su obra, más allá del tiempo y de las expresiones artísticas, conservando la inspiración potentítisima de fe y arte».
«De este modo va construyéndose la casa en la que el pueblo creyente vuelve a encontrarse consigo mismo en el encuentro con Cristo, con Dios. Pero en sus muros externos cada hombre, aunque no sea creyente, puede leer los significados más profundos de la existencia humana. Lenguaje universal de anuncio de salvación. Aquí el Papa ha querido venir a rezar con el pueblo».
La caridad
Por último, el padre Lombardi hace referencia al encuentro que mantendrá el Papa el domingo por la tarde al visitar a personas con discapacidades en la Obra Benéfica el Nen Déu.
Un encuentro así «no podía perdérselo», explica el portavoz. «No hay comunidad creyente sin amor concreto, capaz de transformar, transfigurar el sufrimiento en esperanza y en alegría».
Por eso, concluye, «la caridad vivida es la estrella del camino, el idioma cotidiano que todos pueden comprender. Por aquí pasa necesariamente el camino del Papa».