MADRID, martes, 17 junio 2008 (ZENIT.org).- Caritas presenta en la Exposición Internacional sobre el Agua de Zaragoza, España, inaugurada el pasado 13 de junio, la película «Vivir sin agua».
Josefa, setenta años, viuda, vive en una casa en alquiler desde hace más de cincuenta años; su casero no quiere repararle el baño y está sin ducha, se lava con una palangana. Santiago y Carmen, dos hermanos que viven en una casa de su propiedad, heredada de sus padres, tampoco tienen ducha. Encarna vive en las chabolas de Cogullada y no tiene acceso al agua potable ni a la electricidad. Abdou vive en un pueblo de la provincia de Zaragoza, en una casa habilitada para temporeros que carece de agua caliente y de calefacción.
Estas son algunas de las vidas reflejadas en la película «Vivir sin agua», producida por Cáritas Zaragoza y estrenada con gran afluencia de público el pasado 27 de mayo en la capital aragonesa para inaugurar el programa de la Semana «Agua y Cuarto Mundo» que se desarrollará en el Pabellón de las Iniciativas Ciudadanas El Faro de la Expo del Agua.
Cuando Cáritas decidió sumarse a El Faro (www.elFaro2008.org) tuvo claro que, además de los aspectos medioambientales, cooperación y desarrollo, había una realidad que no debía pasar inadvertida en un marco como el de la Expo: que el agua, aún hoy y en nuestras ciudades, es un factor de exclusión para muchas personas que viven en el primer mundo.
Según el Informe de Infravivienda de Caritas Zaragoza 2004, al menos el 0,10 % de los hogares de Zaragoza, carecían ese año de agua corriente. Y eso influye en todas las dimensiones sociales de una persona: higiene, salud, relaciones humanas u oportunidades para el empleo y la formación. Porque lo que para la inmensa mayoría es un acto cotidiano (abrir el grifo del agua caliente), para otros es un factor de exclusión en el mundo que llamamos desarrollado y que no lo es para todos.
El empeño de Cáritas y El Faro, explica la página web de Caritas Española, «es que la sociedad tome conciencia de que el modelo de desarrollo que hemos elegido no es válido para un número creciente de personas, condenadas a los márgenes de ese modelo, y que si todos somos corresponsables del problema, lo somos también de la solución».
«Agua y Cuarto mundo» es el argumento de una de las doce semanas Faro del Pabellón de las ONG en la que, coordinada por Cáritas, participan doce entidades sociales más.
El Faro pone así de manifiesto su interés por los últimos de entre los últimos en el primer mundo. Y lo hace denunciando la situación y aportando alternativas que con muy poco esfuerzo paliarían la situación en la que se encuentran muchas familias en todas las grandes ciudades y los entornos rurales del mundo desarrollado.
La incidencia del agua en las minorías étnicas, especialmente en chabolas; o en situaciones de pobreza extrema, como en las personas sin hogar o inmigradas sin recursos, son sólo algunos de los temas que serán abordados durante la semana de «Agua y Cuarto Mundo». Estarán también quienes diariamente viven esta carestía para poner rostro humano a estas cifras y comprender lo que supone en la vida cotidiana.
