El pasado sábado llegaba con éxito a los almacenes de Cáritas Irak en Bagdad un convoy de ayuda médica de urgencia fletado por la red Cáritas y que había partido la víspera desde Ammán, según han informado fuentes de esta institución a Zenit.
El contenido de los dos camiones –antibióticos, anestésicos e instrumental clínico básico, valorado en más de 300.000 euros– ha comenzado a ser distribuido entre los centros de ayuda que Cáritas Irak mantiene operativos en el interior del país.
Según el director de Cáritas Irak, Faiq Bourachi, «confiamos que estos suministros ayuden a paliar las necesidades más urgentes del pueblo iraquí».
«La seguridad en la ciudad sigue siendo un problema –aclara–, pero hemos tomado las precauciones necesarias para garantizar el reparto de este envío».
Bourachi reconoce que «nuestros centros de salud se han visto desbordados a la hora de atender a un elevado número de personas, con lo que estos suministros ayudarán al personal médico a dar una respuesta adecuada a todas ellas».
Además de este convoy con destino a Bagdad, la red Cáritas ha expedido otro envío terrestre de material sanitario desde Turquía a las zonas de Mosul y Kirkuk, en el norte de Iraq.
Y una tercera expedición con ayuda humanitaria partirá en los próximos días desde Siria con destino a la ciudad iraquí de Mosul.
En esta misma región septentrional de Irak, el trabajo de los centros de ayuda de Cáritas Irak está siendo apoyado desde los primeros días de la guerra por un equipo médico móvil de la red internacional de Cáritas, que se desplaza permanentemente de una ciudad a otra para proporcionar asistencia sanitaria a diversos grupos de desplazados.
