Italia: Investigada una asociación por organizar «viajes de la muerte»

Acusada de acompañar a enfermos terminales a Holanda

Print Friendly, PDF & Email
Share this Entry

TURIN, 20 noviembre 2001 (ZENIT.org).- La investigación periodística del diario «La Stampa» de Turín sobre los «viajes de la muerte» ha suscitado una indagación judicial en Turín y en el extranjero.

«Exit», una asociación «cultural» turinesa es acusada de organizar viajes a Holanda, donde la eutanasia es legal, para enfermos terminales en busca de la «muerte dulce».

La hipótesis de la acusación –participación en el homicidio del consintiente– se podría extender al presidente Emilio Coveri, que ha sido inscrito en el registro de los indagados, así como a sus
colaboradores, a los médicos holandeses e incluso los familiares de los enfermos.

Además, los magistrados italianos estarían considerando la oportunidad de añadir la acusación de asociación para delinquir. Quienes realizan la investigación no tienen dudas sobre el hecho de que se pueda proceder por homicidio del consintiente, reato que prevé condenas de hasta quince años de prisión.

El 18 de noviembre se realizaron registros en la sede turinesa de la asociación «Exit». Las fuerzas del orden secuestraron ordenadores y documentos. La magistratura quiere comprobar si es cierto que la asociación ayudaba a los pacientes terminales a llegar a Holanda y que por este servicio pedía una retribución económica.

El presidente de «Exit», Emilio Coveri, se defiende: «Nosotros no hemos acompañado nunca a nadie a morir sino que nos hemos limitado a explicar lo que es posible hacer, profundizando en datos científicos sobre esta delicadísima materia».

El cardenal de Turín, Severino Poletto, se pregunta en declaraciones a la prensa: «¿Cómo es posible que haya una organización con el objetivo de hacer en el extranjero lo que está prohibido hacer en Italia?».

«Una cosa es dejar que actúe una asociación para el tratamiento de los enfermos en el extranjero y otra acompañarles a quitarse la vida», responde.

El cardenal comenta además el hecho de que esto suceda en Turín, donde hace algunos años el consejo municipal ya había aprobado una moción a favor de la eutanasia.

Sobre el asunto han intervenido también los médicos católicos que han expresado en una nota la consideración de que «el dolor y la soledad pueden llevar al deseo de morir, pero la respuesta no es dar muerte sino aliviar las causas».

Son «lúgubres viajes sin retorno» bien distintos «de los viajes de la esperanza a los que estábamos habituados», afirma «L´Osservatore Romano», en su edición del 20 de noviembre.

Una práctica, dice el diario vaticano, contra la vida que no viene rehabilitada por el abuso de la metáfora de la «muerte dulce», porque una cosa es combatir el dolor, con todos los medios posibles en el respeto de la persona que sufre, y otra ayudar a esa misma persona a quitarse la vida.

Print Friendly, PDF & Email
Share this Entry

ZENIT Staff

Apoye a ZENIT

Si este artículo le ha gustado puede apoyar a ZENIT con una donación