Los sellos (estampillas) muestran diferentes etapas de la vida del arzobispo de Tegucigalpa, desde su niñez hasta el 21 de febrero, cuando el papa Juan Pablo II le entregó el anillo cardenalicio en una ceremonia especial en el Vaticano.
El valor de la mayoría de los sellos postales es de un dólar. Sin embargo, también hay de 17 y 66 centavos de dólar.
En la principal estampilla de un dólar aparece Rodríguez abrazado por el sumo pontífice en Roma, con la leyenda «una vida consagrada al servicio del prójimo».
El presidente de Honduras Carlos Flores Facussé ha explicado la decisión con estas palabras «a través de esos sellos postales recordaremos siempre momentos especiales de la vida de los hondureños».
El cardenal Rodríguez, salesiano, fue presidente de la Conferencia Episcopal Latinoamericana de 1995 a 1998.