CIUDAD DEL VATICANO, 17 junio 2001 (ZENIT.org).- Juan Pablo II lanzó este domingo una movilización internacional a favor de los refugiados y exigió comprender sus necesidades.
Tras recordar que el miércoles próximo se celebra la Jornada Mundial del Refugiado, al dirigirse a los peregrinos reunidos a mediodía en la plaza de San Pedro, explicó que esta iniciativa «subraya la de debida solidaridad con millones de personas que viven la difícil condición de refugiados y prófugos».
«Esta plaga se ha ido ampliando por desgracia en los últimos años –constató–: aumenta, por tanto, la necesidad de protección internacional, pero aumentan también los países que tienden a limitarla».
Según fuentes de las Naciones Unidas, existen alrededor de 22 millones de refugiados en todo el mundo. La principal causa son los conflictos armados. En Africa, por ejemplo, hay más de siete millones de refugiados. En 1969, eran 750.000.
«Mientras deseo que se remuevan por doquier las causas de las migraciones forzadas –concluyó el Papa al concluir el rezo de la oración mariana del «Angelus»–, invito a renovar los esfuerzos para que no falte nunca a los refugiados la justa comprensión y la asistencia necesaria».