Juan Pablo II pide ayuda para las víctimas de aludes en Guatemala

El Gobierno ha negado ayudas especiales a los damnificados

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CASTEL GANDOLFO, 16 septiembre 2002 (ZENIT.org).- Juan Pablo II ha comunicado su dolor a la población de Guatemala y ha pedido ayuda para las víctimas de los aludes que han provocado la muerte de al menos 31 personas en una remota aldea del municipio de San Lucas Tolimán en el oeste del país.

En el momento en que la Sala de Prensa de la Santa Sede publicó este lunes el mensaje pontificio, los equipos de socorro seguían a la búsqueda de unas seis personas desaparecidas.

Un telegrama enviado por el cardenal Angelo Sodano, secretario de Estado vaticano, al nuncio apostólico en el país centroamericano, el arzobispo Ramiro Moliner Inglés, ha hecho llegar el dolor del Papa por esta tragedia, así como por las numerosas víctimas que han dejado los aludes en varias zonas del país.

El alud, que tuvo lugar el jueves, arrasó con más de 45 casas de la aldea El Porvenir, del empobrecido Municipio San Lucas Tolimán, ubicado 150 kilómetros al oeste de Ciudad de Guatemala. El sábado la comunidad enterró a 27 de los fallecidos en un sepelio colectivo.

«El Santo Padre desea hacer presente su especial cercanía a los damnificados, ofreciendo sufragios por el eterno descanso por los fallecidos y rogando al Todopoderoso que conceda consuelo y esperanza cristiana a cuantos sufren esta dura adversidad», dice el mensaje pontificio.

«Asimismo, exhorta tanto a las instituciones nacionales e internacionales como a todas las personas de buena voluntad a que intensifiquen la solidaridad y caridad fraterna, aportando las ayudas necesarias para superar la dramática situación en que han quedado sumidas muchas familias guatemaltecas».

El Papa concluye expresando «su sentido pésame a los familiares de los fallecidos», y alentando «con paternal solicitud a todos los afectados por esta tragedia» en ese país que tan cálidamente le acogió entre el 29 y 30 de julio.

Al visitar este sábado El Porvenir, el vicepresidente de Guatemala, Juan Reyes, negó ayudas especiales del gobierno a los damnificados por la catástrofe, porque –según él– hacerlo sería sólo «hacer show».

«Si cada vez que sucediera algo, viniéramos a hacer show, estaríamos mal como Gobierno. Nuestro compromiso es servir día a día. Ya aprendimos que no hay que prometerles nada, porque al día siguiente sale en los medios de comunicación que no cumplimos», afirmó el vicepresidente a los pobladores de El Porvenir y aldeas vecinas al responder preguntas sobre la ayuda.

«Para evitar estas tragedias los alcaldes deben prohibir construcciones en lugares de riesgo», añadió el vicepresidente.

Varias emisoras radiales de Guatemala han organizado colectas de víveres, ropa, mantas y otros bienes básicos para paliar la precaria situación de los sobrevivientes.

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ZENIT Staff

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