CIUDAD DEL VATICANO, 14 octubre 2002 (ZENIT.org).- La Santa Sede denunció este lunes una maniobra «innoble» montada en Moscú para desacreditar a la Iglesia católica, implicándola con falsedades en un asunto de prostitución.
«Han llegado a la Santa Sede noticias preocupantes sobre una innoble operación orientada a desacreditar a la Comunidad de los Frailes Franciscanos Menores Conventuales de Moscú y, a través de ellos a la Iglesia católica», constata Joaquín Navarro-Valls, portavoz vaticano, en un comunicado de prensa.
«Sin que ellos lo supieran, los religiosos han visto cómo un apartamento de su propiedad –alquilado a una persona privada que decía quererlo usar para una obra de beneficencia– se ha transformado en una casa destinada al ejercicio de la prostitución», revela el comunicado.
«Recientemente –añade–, un conocido diario de la capital, así como el primer y el tercer canal televisivo han difundido noticias construidas falsamente, entre las que se presentaban imágenes de personas disfrazadas con hábitos religiosos, retratadas en actitudes inmorales, con el evidente objetivo de dañar la reputación de la comunidad católica».
La Santa Sede –sigue informando Navarro-Valls– ha «protestado enérgicamente ante las autoridades competentes».
«Al mismo tiempo, los superiores locales de la Orden Franciscana de los Frailes Menores Conventuales han publicado un comunicado de prensa en el que rechazan toda acusación y responden a las falsa informaciones difundidas en Moscú».
«La Santa Sede se asocia a esta legítimas protestas y espera que la justicia siga su curso, como corresponde a un Estado de derecho», concluye el comunicado.
La denuncia del Vaticano tiene lugar después de que hayan sido expulsados del país sin explicación alguna un obispo y al menos cinco sacerdotes.
En días pasados, el arzobispo Tadeusz Kondrusiewicz, presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Rusia, ha denunciado también manifestaciones contra los católicos organizadas por sectores de la Iglesia ortodoxa, la prohibición por parte de las autoridades de construir nuevos templos católicos, y actos de vandalismo contra las iglesias católicas (Cf. Zenit, Zenit, 13 de septiembre de 2002).
En un pasado comunicado de prensa, Navarro-Valls había hablado de «auténtica persecución» contra los católicos en Rusia (Cf. Zenit, 10 de septiembre de 2002).