CIUDAD DEL VATICANO, miércoles, 10 noviembre 2004 (ZENIT.org) Al hacer un balance de los últimos cuarenta años de diálogo entre los cristianos, el cardenal Walter Kasper, presidente del Consejo Pontificio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, considera que el auténtico ecumenismo no daña a la identidad católica, por el contrario, la refuerza.
El purpurado alemán llegó a esta conclusión al presentar en la Sala de Prensa de la Santa Sede el congreso internacional «El decreto sobre el ecumenismo del Concilio Vaticano II, cuarenta años después» que tendrá lugar del 11 al 13 de noviembre en Rocca di Papa (localidad cercana a Roma) para hacer un balance sobre las cuatro décadas de diálogo entre los cristianos promovidas a partir de la publicación del decreto «Unitatis redintegratio».
Responderá a preguntas que el mismo purpurado alemán enunció: «¿cuál era el mensaje y el objetivo del documento? ¿Qué efecto ha tenido en estos años? ¿A dónde hemos llegado hoy en el ecumenismo? ¿Cuál es el que camino que todavía queda por recorrer?».
El cardenal consideró que «la conciencia ecuménica en la Iglesia ha crecido», pero reconoció que «todavía existen problemas y desilusiones» y «obviamente todavía no hemos alcanzado el objetivo: la comunión plena y visible».
«Nos encontramos en un estadio intermedio. En ocasiones, persisten antiguos prejuicios. Hay que deplorar también señales de pereza y egoísmos», subrayó.
De hecho, el presidente del Consejo Pontificio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos constató que a veces «el ecumenismo se convierte en presa de un activismo superficial».
Ante la pregunta, «Ecumenismo, ¿a dónde vas?» (la formuló en latín con el famoso «quo vadis»), Kasper explicó que nos encontramos ante dos «tareas» fundamentales: «la identidad católica y el ecumenismo espiritual».
«La sospecha de que el diálogo ecuménico perjudica a nuestra propia identidad católica es una sospecha grave», advirtió. «La verdad es lo contrario: el diálogo presupone socios que tengan su propia identidad».
En relación al ecumenismo espiritual indicó que «el ecumenismo no es una forma de diplomacia eclesiástica», sino un «proceso espiritual». En este sentido reveló que su Consejo Pontificio ha elaborado el borrador de un «Vademécum de ecumenismo espiritual», en el que se ofrecerán «sugerencias para las diócesis, líneas de orientación».
El responsable del diálogo ecuménico de la Santa Sede alentó los encuentros entre cristianos, así como intercambios monásticos y convivencias entre movimientos: «Hay mucho movimiento en las bases, y esta es nuestra esperanza», dijo en respuesta a quien le preguntó si el ecumenismo no era un asunto de élites.
El obispo Brian Farrell LC., secretario del Consejo Pontificio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, reveló en la rueda de prensa que a la conferencia sobre los últimos cuarenta años del diálogo ecuménico asistirán 260 personas, entre ellas, representantes de 28 conferencias episcopales de África, 21 del continente americano, 28 de Asia, 25 de Europa y 2 de Oceanía y de los patriarcados orientales católicos.
Está prevista, además, la presencia de 27 delegados fraternos de las Iglesias ortodoxas, las Antiguas Iglesias de Oriente, las Iglesias y Comunidades cristianas de Occidente y organizaciones cristianas internacionales.
Participarán también representantes de diferentes organismos de la Curia romana y profesores de las universidades pontificias de Roma.
El Congreso comenzará con una conferencia inaugural del cardenal Kasper sobre «El significado permanente y urgente de «Unitatis redintegratio»». A continuación, intervendrán el metropolitano de Pérgamo, Johannis Zizioulas, del patriarcado ecuménico de Constantinopla, que ofrecerá una perspectiva ortodoxa del decreto y el profesor Geoffrey Wainwright, del Consejo Metodista Mundial, que hará una lectura del documento desde el punto de vista de las Iglesias originadas de la Reforma.
En la segunda jornada, el obispo Farrell dará a conocer el resultado de un cuestionario enviado por el dicasterio a las conferencias episcopales con los datos más actualizados sobre el compromiso ecuménico en los diferentes contextos locales.
Por su parte, monseñor Eleuterio F. Fortino, subsecretario del Consejo, presentará un documento cuyo título es «La acción del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos desde la promulgación de «Unitatis redintegratio» hasta hoy».
El sábado 13 de noviembre, los cardenales Ivan Dias, arzobispo de Bombay (India) y Cormac Murphy-O’Connor, arzobispo de Westminster (Gran Bretaña), además de Chiara Lubich, presidenta del Movimiento de los Focolares, y el padre Enzo Bianchi, Prior de la Comunidad Monástica de Bose (Italia), hablarán sobre las perspectivas futuras del decreto.
La Conferenza si concluderà con la celebrazione dei Vespri nella Basilica di San Pietro presieduta da Giovanni Paolo II.